Hoy, 7 de septiembre, arranca el proceso para la jornada electoral del domingo 6 de junio de 2021. Durante los 9 meses por venir, la efervescencia política habrá de acrecentarse y la confrontación entre actores políticos será mucho mayor. Las descalificaciones, calumnias y verdades a medias serán el pan de cada día y algunos se adjudicarán la verdad absoluta y descalificarán a precandidatos de sus propios partidos y luego a candidatos de otras fuerzas políticas.
Está claro que las batallas más cruentas serán al interior de los partidos políticos, ya que ahí no hay una confrontación ideológica o de propuesta política; el elemento esencial para descarrilar al adversario será lograr su desprestigio ante la opinión pública.
Para los diferentes institutos políticos la elección intermedia del próximo año es determinante, y las estructuras electorales son fundamentales para incentivar el voto ciudadano; un voto que, seguro, tendrá una merma significativa, comparado con el proceso electoral del 2018. El ánimo social y la pandemia habrán de incidir en la participación ciudadana dentro de la jornada electoral.
Gran parte de los partidos políticos buscarán participar solos en la mayoría de las elecciones a diputados federales, diputados locales, alcaldes y gubernaturas; aunque sin duda, en algunas de ellas habrá alianzas parciales entre las diferentes fuerzas políticas.
La mayor dificultad que enfrentan algunos partidos políticos, como Morena o Acción Nacional, es la confrontación interna que surgirá en la búsqueda de atender las necesidades propias respecto a las candidaturas. La saturación de aspirantes es lo que dificultará las posibles alianzas estratégicas. Las alianzas entre partidos como el PRI con el PAN, o el PAN con Morena, o Morena con el PRI, se ven muy lejanas; ya que, al no armonizar la identidad ideológica, se lastima la base partidista, es decir el voto duro.
La ruta hacia el 2024 ya inició y la elección intermedia será un magnífico laboratorio para observar el ánimo social y, sobre todo, las posibilidades de alianzas que estratégicamente permitan triunfos electorales, como se vivió en el pasado proceso electoral.
Los partidos de nuevo registro no podrán hacer alianzas en el 2021; sin embargo, esto permite el fortalecimiento de sus estructuras para refrendar su porcentaje de votación y en algunos casos para sostener su registro.
La negativa del Consejo General del INE a otorgar el registro a México Libre, de Margarita Zavala, más que favorecer al gobierno de izquierda que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador, electoralmente, lo afecta; ya que la consolidación de este partido incidiría, de forma consistente y directa, en las bases de Acción Nacional, por lo que es inválido el reclamo hacia el gobierno federal. Lo mismo sucedería con otros nuevos partidos, cuya base social se sostiene en la base electoral de Morena.
De refilón
Campeón sin corona, así es reconocido el diputado Gerardo Fernández Noroña, quien acrecentó de forma significativa su base de simpatizantes, al defender con pasión y clara convicción su derecho a presidir la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados. Fernández Noroña es reconocido por ser el más representativo defensor de la 4T y del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.