Ya listos para saborear la gran final navideña entre América y Monterrey . Este año, como todos saben, coincide que el campeón de la Concachampions que acude al Mundial de Clubes llega a la final en este Apertura 2019 y se aplica el acuerdo establecido que los dos partidos por el título se aplazan hasta el término de la participación del equipo mexicano.
Esto se aprobó hace muchos años en el Comité de Desarrollo Deportivo y en la Asamblea para dar apoyo al club participante y que luego pudiera estar en la gran final.
Morelia fue la sorpresa al acceder a la semifinal, casi dejando fuera al América; Necaxa tuvo un gran torneo, despidieron a su director deportivo, trajeron a Quiroga en lugar de Brian Fernández y junto con Memo Vázquez dieron pelea hasta que se toparon con un renacido Monterrey.
América, como siempre dando juegos espectaculares, de altibajos, sufridos, pero es la genética del Águila; Miguel Herrera gestiona muy bien su plantel y a pesar de las múltiples lesiones durante la primera mitad del torneo, siempre se mantuvo en zona de Liguilla, tiene un gran equipo y junto con Santiago Baños está por méritos propios acariciando el campeonato.
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En el Monterrey, Duilio Davino se atrevió a despedir a Diego Alonso y la llegada de Antonio Mohamed les vino a dar una nueva vida, pues conoce las Liguillas, conoce al plantel y supo sacarle provecho a cada jugador, potencializando sus funciones. De los nueve equipos que cambiaron técnico durante el torneo, sólo Monterrey y Morelia llegaron a la Liguilla.
Ahora se aparece la ecuación de ver a cuál le afectará más el que la final no sea inmediata; si a las Águilas, que seguramente tendrán un partido de preparación o a los Rayados con un viaje largo, pero con partidos exigentes y competitivos; ahí estará la clave, en no perder ritmo, intensidad, y recuperación de los jugadores.
Lo que es un hecho, es que la hipótesis de que los equipos de gran presupuesto son los que dominan las Ligas, se corrobora en la Liga MX ya que Tigres, América y Monterrey aparecen en 15 de las últimas 20 finales, obviamente teniendo buenos planteles, bien dirigidos y con una vasta banca que responde cuando se requiere.
Ha sido difícil para equipos modestos en su plantel y en su gasto, que puedan ser protagonistas y sobre todo será cada vez más difícil llegar a la final y ser campeón.
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Cruz Azul
es otro de los poderosos que ha quedado a deber, la Máquina está desbielada desde hace varios años y este último torneo, gastaron 80 millones de dólares sin que rindieran fruto.
En las principales Ligas de Europa, podemos observar que siempre dominan los mismos dos o tres equipos que hacen eco de su gran presupuesto y obvio de su fuerte plantel; rara vez esto no resulta y aparece un equipo Cenicienta como el Leicester en la Premier League.
Hay que adaptarse a esta realidad y siempre mantener el sueño de que en el torneo mexicano, de vez en cuando, se aparezca un David y venza a Goliat.
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