Hay que ser muy cautelosos en la clasificación final de los equipos en este torneo que acaba de finalizar, ya que puede ser engañoso, confundir y lustrar todo lo que se hizo mal. Los objetivos que no se cumplieron, las promesas, lo que no funcionó, si la planeación respondió como se esperaba, si se avanzó en la tabla de cocientes, si los refuerzos y los jóvenes respondieron, si la afición quedó satisfecha. Todo esto lo comento, porque se percibe euforia en equipos que, por su historia, proyecto y popularidad, deben estar siempre en los primeros lugares y ahora se conforman y festejan al ubicarse en noveno ( Monterrey ), décimo (Guadalajara ) y undécimo (Pumas ).

Los Rayados,

con el equipo más caro —técnico incluido— después de perder cuatro partidos al hilo y empatar sus dos últimos, le ganan al América la Concachampions y esto nubla el fatal torneo que tuvieron. Las Chivas, que hicieron inversiones importantes y nos vendieron que —de aquí en adelante— se “hablaría de campeonatos”, terminan en décimo lugar, ratifican a Marcelo Michel Leaño y la afición responde con quejas, burlas y frustración, por lo hecho por el equipo.

Este torneo termina como uno de los menos brillantes en cuanto a nivel futbolístico mostrado, siendo el América el equipo más regular, sin convencer plenamente y decreciendo su accionar en las últimas jornadas. Ha sido el certamen con el peor promedio de goles —con 2.17 por partido— desde 1922... Hace 99 años.

La abolición del ascenso-descenso hace que algunos entrenadores entren en zona de confort y no asuman los riesgos para proponer los partidos, máxime sabiendo que hasta el lugar 12 los clasifica a un repechaje. La crisis de los clubes por la pandemia, que los llevó a disminuir los montos invertidos en jugadores de calidad, la falta de planeación, capacitación, inversión y preparación en las categorías menores en varios, para formar nuevos talentos que no sólo debuten, sino se consoliden en sus equipos, las diferentes alternativas de entretenimiento que tiene al día de hoy el aficionado, el golpe económico a los bolsillos que sufrió la gente en esta pandemia, lo cual les impide acudir a los estadios y/o consumir productos de su equipo, la calidad del producto (nivel futbolístico de los partidos)... Todo eso provoca que la afición no se interese como antes.

Es hora de verdaderamente replantear varias aristas en el reglamento, el formato de competencia, los lineamientos y tener clara la visión de qué es lo que queremos, cómo lo obtendremos y con qué llegaremos hacia ese objetivo, planeación estratégica pura, para así poder retomar y volver a tener a la afición y a los patrocinadores verdaderamente involucrados, haciendo sinergia, en un producto de alta calidad que es este increíble deporte, el futbol.

Temas para el café.

Ricardo Ferretti. El Tuca no ha entendido lo necesarios y urgentes cambios que nuestra sociedad estaba gritando desde hace mucho tiempo, como erradicar la homofobia, la misoginia, la violencia de género, el machismo.

Tuca

lleva dentro del ámbito del futbol prácticamente toda su vida. La Federación se está batiendo a duelo para acabar con el grito homofóbico de la afición y —en una conferencia de prensa, después de perder 3-0 contra su exequipo— hace comentarios homofóbicos y misóginos, haciéndose el bromista, con la complicidad de algunos de los reporteros ahí presentes. Es el momento perfecto para que la Comisión Disciplinaria sea rigurosa y le aplique todo el peso del reglamento. Se reconoce que posteriormente ofreció disculpas, pero el daño está hecho.

Estos famosos personajes

(técnicos, jugadores, directivos y medios de comunicación) deben ser ejemplo para toda la sociedad y no sólo abstenerse de pronunciar algo negativo, sino deben ser promotores del respeto, de comentarios positivos y tener un comportamiento ejemplar para toda la juventud.

Xavi.

Regresa al Barcelona, ahora como entrenador, pero llega con la espada desenvainada e invitando a todo el plantel a retomar las bases que lo llevó a ser “ Mes que un club” , a épocas de oro, cuando había orden, compromiso, solidaridad y complicidad de todos los integrantes, situación que —al día de hoy— no existe. Ya habló de “vacas sagradas”, del cero respeto a los lineamientos internos, rebeldías y vidas privadas que no reflejan la exigencia que debe tener un jugador de este club. La esperanza renació y este hijo pródigo tiene un gran reto.

@hginarritu

Google News

TEMAS RELACIONADOS