Sin alcanzar el nivel que sus seguidores quisieran, el Real Madrid logró empatar un partido en el que había sido mejor que su rival, aunque le sigue faltando encontrar las victorias en momentos clave del campeonato. En caso de haberla logrado, lo hubiera puesto por encima del Barcelona, al que estará enfrentando a media semana y donde tendrá que mostrar algo distinto a lo de ayer en Mestalla si quiere ganar.
De a poco, Zinedine Zidane ha ido encontrando un sistema de juego claro, a diferencia de su primera etapa al frente de este conjunto, e —incluso— lo ha ido manejando mejor, sin importar el 11 que ponga de inicio, aunque está claro que todavía se encuentra lejos de ser aquel que pasaba por encima de sus adversarios.
Algo de lo que ha carecido este equipo es de contundencia, cuando —en posesión de balón— ha sido superior a sus rivales, aunque parecería que en el último cuarto de cancha no cuenta con el trabajo suficiente, llegando a ser muy predecible en sus jugadas y haciendo más sencillo el trabajo para la defensa contraria.
Ante el Barcelona , veremos a Casemiro como titular y seguramente lo que muestre el Madrid será muy diferente, teniendo desde el inicio al que hasta ahora ha sido el mejor del conjunto merengue en esta campaña.
Ambos equipos llegan a este partido con 35 unidades y el que logre ganar se pondrá como líder de la Liga española , de ahí que sea tan importante este encuentro para los dos clubes, más allá de la eterna rivalidad.