El conformismo no aplica en el partido entre
de mañana por la noche. Más allá de ya estar clasificados a la Liguilla , de liderar el campeonato sin dificultades, esta versión del duelo más odiado para los cruzazulinos representa establecer una marca, de esas que será muy compleja de romper en el futbol mexicano.
Superar los números del León en el Clausura 2019 y del Necaxa en la 1934-35 (obtener 12 triunfos consecutivos), debería ser el gran aliciente para salir a la cancha del Azteca a arrasar al América . Tanto daño le ha hecho el equipo de Coapa en su historia como para darse el lujo de perder esta marca frente a ellos. Las humillaciones en finales contra el equipo hoy dirigido por Santiago Solari y los 23 años sin título de Liga , hacen que esta marca sea necesaria para que este equipo realmente renazca y demuestre de una vez por todas que, cuando se debe ganar, gana y no como siempre pasa, que cuando más se espera de ellos, pierden.
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Esta historia puede acabarse en esta temporada, primero haciendo historia en la Liga y después buscando como sea el ansiado y anhelado título. Todo lo demás sería un renglón más en la decepcionante y absurda historia de un equipo que quiere seguir siendo grande, pero que solamente lo es por el amor de sus aficionados, no por éxitos deportivos.
Y América también debe salir a indigestarse de cruzazulismo. La decepción de la derrota contra los “cavernícolas” hondureños hace que sea una obligación no volver a decepcionar en su campo. Claro, aquí no enfrentarán la mala leche centroamericana y podrán desplegar el futbol que a Solari le ha funcionado, y además buscarán igualar una marca del club de ocho victorias seguidas, mismas que consiguió Miguel Ángel Zurdo López en la temporada 1993-94 y Jorge Solari en el Verano 1997 .
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El duelo entre América y Cruz Azul de este Guardianes 2021 no será solamente por “el orgullo”, como comúnmente intentan vender uno de esos duelos cada que se presenta. El de mañana por la noche es un partido que es la ocasión perfecta, para cualquiera de estos equipos, de dar un paso firme rumbo al título, con un par de entrenadores de quienes muchos se pitorrearon cuando tomaron a sus respectivos equipos, prácticamente con el tiempo encima, pero hoy los tienen como los mejores del torneo, no solamente en números, sino en lo futbolístico.
Este partido representa todo lo que los aficionados de estos clubes quisieran cada que se enfrentan. Hay mucho en juego, desde el primer lugar, hasta el dar golpe de autoridad que puede sacar de balance al odiado rival. Ojalá lo que veamos en la cancha del Azteca responda a esas expectativas y demuestren por qué lo más atractivo de esta decaída Liga ha sido la lucha entre estas dos instituciones.
