nació en la provincia de Ontario, en Canadá. Su madre canadiense, con ascendencia directa con Gran Bretaña, en específico con Inglaterra. Su padre, mexicano; por eso podría jugar para tres selecciones nacionales: Canadá, Inglaterra y México. De hecho, ya anotó goles con la Sub-16 de Inglaterra, contra Noruega y Dinamarca.
Con 18 años de edad, no suma partidos en Primera División con el Arsenal y, aún así, condiciona su llamado a la Selección Nacional de México. Su decisión dependerá de qué equipo lo lleve a Qatar 2022, ya que las tres selecciones están clasificadas, aunque para ser sinceros, está muy lejos de la órbita inglesa.
Pero el reconocimiento va para Gerardo Tata Martino , quien fue enfático en su respuesta en la conferencia de prensa previa al partido contra Guatemala: “Nadie condiciona su llamado a la Selección con ir a un Mundial”, y tiene razón.
Si los canadienses o ingleses caen en ese juego, es problema de ellos. Conociendo la cultura deportiva de la selección de Canadá, John Herdman, su entrenador inglés, tampoco se prestaría a este estúpido juego de Flores y su familia. Tal vez Inglaterra al final, pues ya fue convocado a una selección de niños de la Isla.
Una posición totalmente chantajista de un desubicado futbolista. Es un jugador que todavía no tiene la condición como para ser titular en su equipo, en donde aún no es nadie, y exige algo irreal, aunque claro, incluso cuando fuera un consolidado, tampoco se entenderían estas actitudes.
Este juego de los Flores, que viene desde la cabeza del padre de este chico —que tiene dos hermanas también futbolistas y seleccionadas mexicanas— debe cortarse de tajo por parte de la Federación Mexicana de Futbol y la Dirección Deportiva de la misma. Porque acceder a algo tan ridículo como esto es dejar un mal precedente, ya que tendrían que acceder a la petición de otros padres de jugadores que querrán pedir y pedir, y eso por supuesto no es nada sano. Porque si hoy le dan el Mundial de Qatar a Flores, entonces mañana cuando les pida más dinero por primas, permisos especiales y otras cosas, tendrán que aceptar también.
Y lo mismo para el resto de los futbolistas, porque una cosa es que en la Femexfut deban pelear por los jugadores mexicoamericanos de calidad, por ejemplo, pero de ahí a conceder todo lo que el padre de esos muchachos quiera, es muy diferente. Marcelo Flores no estará en Qatar 2022, y no por calidad, sino porque su entorno cercano lo aconsejó mal y ahora tendrá que pagar las consecuencias de sus palabras y deseos.
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