Si hay una noche en la que México debe ganarle a Argentina, es la de hoy en San Antonio. Gerardo Martino utilizará a los futbolistas de mayor nivel que tiene nuestro futbol y Lionel Scaloni seguirá en el recambio generacional, sin Messi, sin Agüero, sin Icardi, sin Di María ... Un equipo descafeinado.
Grandes pasajes ha vivido la Selección Mexicana contra los argentinos, pero siempre termina perdiendo. En el Mundial de Alemania, dirigida por La Volpe, fue mejor, pero un gol en tiempo extra, una individualidad de Maxi Rodríguez, y todo se acabó. Igualmente pasó unos años antes, en la final de la Copa América de Ecuador, cuando el equipo de Miguel Mejía Barón, por un error, por una desconcentración, combinada con una individualidad de Gabriel Batistuta... Y todo se acabó también.
Y así seguimos. En un amistoso dirigido por el propio Gerardo Martino, en Dallas, la Selección Mexicana ganaba dos a cero, entró Messi y todo se acabó, el equipo mexicano terminó empatando, en una velada decepcionante. Es decir, esta noche en el Alamodome de San Antonio, es la oportunidad para ganarle a un equipo al que han pasado 15 años sin hacerlo.
Se acaban los amistosos de SUM en 2019, bajo fuertes reclamos de argentinos y mexicanos. Los organizadores encontraron a entrenadores con carácter, Martino y Scaloni, quienes al ver el pésimo estado del campo, lo manifestaron, uno en privado, el otro en plena conferencia de prensa.
El entrenador de la Albiceleste fue contundente al afirmar, en su comparecencia con los medios de comunicación, que el campo era inservible, mientras que Martino lo hizo —junto con Gerardo Torrado e Ignacio Hierro— en pleno centro del campo, enfrente de los medios de comunicación que cubrían el entrenamiento mexicano.
Plan con maña, dar frente a cámaras y periodistas esta reclamación a un ejecutivo de Soccer United Marketing , evidenciarlos que los campos de juego, en la mayoría de los partidos disputados en Estados Unidos, son hasta peligrosos para los futbolistas.
Es cierto que Martino reservó a sus mejores hombres para el juego de esta noche, pero a algunos podría importales dos reverendos pepinos meter fuerte la pierna, a causa del deplorable estado de la cancha en el Alamodome, y será comprensible. A final de cuentas, no deja de ser un partido de preparación, y una cancha así podría costarles demasiado, de cara a sus respectivas temporadas.
No puede olvidarse lo sucedido con Néstor Araujo, en el estadio de los Cowboys de Dallas, previo al Mundial Rusia 2018. En aquel partido contra Croacia, otra cancha floja, menos maltratada que en la que jugarán hoy, le costó una severa lesión que lo dejó fuera del certamen más importante del futbol, en el que Juan Carlos Osorio lo visualizaba como titular.
Doloroso episodio que muchos no querrán repetir esta noche, porque lo de SUM es impresentable. Pese a esto, la Selección Mexicana tiene la obligación de derrotar a una mermada Argentina. Es hoy la mejor oportunidad de acabar con esa hegemonía de tres lustros.
