Merecemos un mejor equipo y no este grupo limitado de jugadores, cuerpo técnico y directiva. Nuestros queridos Pumas están extraviados, irreconocibles. Es frustrante observar a este equipo en el campo, porque no juega bien, es predecible, carece de ingenio y sorprende poco. Es increíble cómo han perdido jerarquía en la Liga.
Los Pumas de Míchel son poco atrevidos, no arriesgan nada. Su paso por el club auriazul no ha generado gran cosa y, a falta de dos jornadas, la apuesta va que vuela para ser un rotundo fracaso.
Grandes culpables también del mediocre funcionamiento de nuestros queridos Pumas son los jugadores. Los Malcorra, Iturbe, Angulo, Rodríguez y Mora deben estar avisados que no se contará con sus servicios para el próximo torneo; de los nacionales, cumplieron ya su ciclo los Barrera y Cabrera. Necesitan ofrecer mucho más los Iniestra, Mozo, Jáquez, Quintana y Mendoza; los refuerzos, Vigón y Barragán, poco y nada de ellos.
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La nueva directiva requiere una buena estrategia para armar un equipo competitivo: invertir inteligente en extranjeros, trabajar bien y a fondo en La Cantera, terminar con el gran negocio en el que se han convertido las fuerzas básicas. Los Pumas no se pueden dar el lujo de ser medianos, pertenecen a la élite de los cuatro grandes. Si bien, no cuentan con los mismos recursos económicos de América, Chivas y Cruz Azul , sí están obligados a clasificar siempre a la Liguilla y ser campeones. Besos y abrazos para todos.
@elmagazo
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