Qué buen reto se les viene a dos de los mejores deportistas mexicanos de los últimos años : ganar, gustar y convencer.
Sergio y Saúl
necesitarán de todo su ingenio para salir bien librados de sus respectivos eventos. Cargan con mucha presión, interna y de fuera, que deben saber controlar. No es fácil tener encima a todo un país que los idolatra, pero que al mínimo error los pulveriza. Ambos querrán que el desenlace de su evento sea convincente para cada uno de los que presenciarán su participación.
Checo Pérez está en nuestro país para correr el Gran Premio de México, de la Fórmula 1.
Mucha gente es fanática del automovilismo, pero se han agregado cientos o miles por lo que ha hecho el tapatío en esta temporada con Red Bull. En 2021 ha crecido la Checomanía. En redes sociales, sobre todo, se ha dado un fenómeno muy agradable para el piloto mexicano: todos quieren saber en qué lugar quedó Checo, cómo le fue en la pista, pudo o no pelearle a los Mercedes, qué sitio ocupa en el campeonato de pilotos, de qué forma ayudó a su coequipero Verstappen, qué irreverente maniobra hizo para mantenerse por delante del rival o rebasarlo, en qué falló. Red Bull ha levantado la imagen, la carrera de Sergio Pérez debe responder a todo el apoyo y cariño de la gente. Es su momento, ya no puede darse el lujo de fallar.
Saúl Canelo Álvarez
subirá al ring de Las Vegas entre polémicas y cuestionamientos, nada nuevo, de su adversario. Saúl no encuentra aún la manera de demostrarle a la gente que es el gran campeón que todo México espera en el boxeo.
Caleb Plant
es el próximo en la lista. El norteamericano en el papel no tiene con qué derrotar a Saúl. La experiencia de Álvarez aplasta brutalmente la de Plant, es casi imposible una sorpresa, aunque es verdad que existen los golpes de suerte.
La extraordinaria preparación del Canelo, su estrategia, poder en los golpes, lo han llevado a consagrarse como el mejor; ha superado con facilidad a sus enemigos. Desafortunadamente para Saúl, sin importar la forma en que gane, tendrá señalamientos desfavorables sobre la calidad de peleadores que enfrenta. Siempre es así con él, y está muy acostumbrado.
Será un fin de semana de mucha adrenalina para el aficionado mexicano, siempre hambriento de observar, analizar, y festejar a los compatriotas. El sábado podrá emocionarse con el Canelo Álvarez con su pelea y el domingo con Checo Pérez en su carrera. Hay que disfrutar a estas dos joyas de nuestro deporte que coinciden en tiempo, forma y fechas, y que seguramente darán su máximo para ganar, gustar y convencer. Si tienes entradas para cualquiera de los dos espectáculos, ¡felicidades! ¡qué afortunado!; si no, tranquilo, serán transmitidos en televisión abierta para que todo México vea a sus nuevos ídolos.
@elmagazo