Se ha celebrado el 50 Aniversario de la “Conferencia de la ONU sobre el Medio Humano” (1), que se llevó a cabo del 5 al 16 de Junio de 1972 en Estocolmo, Suecia. Registrada como la primera conferencia mundial sobre el medio ambiente, colocó las cuestiones ambientales en el primer plano de las preocupaciones internacionales. Y después de 5 décadas ¿Cómo nos encontramos?

Con imágenes mostrando el descongelamiento de los polos, la desertificación de la tierra por sequías, incendios en bosques, inundaciones inesperadas, así como noticias sobre la pérdida de la biodiversidad, (como la muerte del 14% de los arrecifes de coral en 12 años (2)), reveladas por reconocidos activistas ambientales, científicos, e instituciones académicas, nos alertan que estos fenómenos son consecuencia del Cambio Climático, cuya amenaza va en aumento.

Hace cinco décadas quizá no sabíamos qué hacer y como sociedad esperábamos que gobierno y empresas resolvieran los problemas, mientras incrementábamos nuestro consumismo.

Pero entonces… ¿quién debe actuar y cuál es la contribución que los diferentes actores pueden aportar para mitigar el Cambio Climático, sin tener que esperar a que “los otros” actúen primero?

El Cambio Climático refiere al Calentamiento Global de la Tierra, originado por la actividad humana que ha incremento de la emisión de CO2, y de otros “Gases de Efecto Invernadero” (GEI´s), que ha rebasado la capacidad de las flora terrestre y marina que puede convertir el CO2 en el Oxígeno que respiramos.

Ante ello, es fundamental que los diferentes actores identifiquen acciones que pueden emprender para eliminar o reducir la emisión de GEI´s:

  1. Fabricantes (de electrodomésticos, vehículos, ropa, etc.): analizar en los procesos productivos las principales fuentes de emisión de GEI´s, incluyendo materias primas y componentes de sus proveedores, puede conducir a soluciones como el uso de energía solar o eólica. Otras acciones son: incorporar material reciclado en procesos, comprar suministros locales que reduzcan las distancias de transportación, reducir materiales de empaque y recolectar productos desechados.
  1. Transformadores, proveedores y distribuidores: colaborar para el desarrollo de “cadenas verdes” que incluyan la recuperación de maquinaria, equipos y aparatos eléctricos y electrónicos. A partir de computadoras, TV`s, celulares, y electrodomésticos se pueden recuperar metales con alto valor económico como el Coltán y el Cobre, partes y componentes que se pueden reutilizar en nuevos equipos. El ahorro en energía, al utilizar materiales reciclados en lugar de materiales vírgenes puede llegar al 56% en el caso del Acero, 90% con el Cobre, 92% con el Aluminio y 87% en el caso de plástico, esto sin afectar el desempeño del producto final.
  1. Consumidores: adoptar hábitos para reducir la huella de carbono individual como el uso de bicicleta, transporte público, conducir a velocidad que incremente el rendimiento del combustible, utilizar equipos ahorradores de luz, separar la basura para facilitar la recuperación y reciclaje, comprar ropa que tenga una larga vida, e incluso, compartir el auto con otras personas que van en la misma ruta.
  1. Gobiernos: propiciar la separación de residuos orgánicos e inorgánicos y la instalación de centros de acopio de plástico, llantas, hules, madera, cascajo, textiles y otros incrementará el reciclaje y compostaje. Emitir normas de eco-etiquetado, para el análisis del ciclo de vida de los productos, o para delimitar el % de material reciclado en los productos, orientará a los consumidores a diferenciar productos ecológicos. Respaldar financiamientos bancarios de bajo costo para proyectos ambientales de las empresas, así como aplicar impuestos proporcionales a la generación de residuos y de contaminantes, son otras formas de apoyar la reducción de GEI´s.
  1. Medios de comunicación, centros educativos, asociaciones, ONG´s y sociedad en general: educación ambiental de todos los actores, propiciar la formación de empresas socialmente responsables, promover la venta de productos con una baja huella ambiental, detener proyectos con impactos ambientales significativos, difundir ejemplos de empresas y gobiernos que actúan en favor del medio ambiente, son algunas de las muchas tareas por impulsar.

En conclusión, si bien cada actor de la cadena de valor tiene responsabilidades específicas dentro de sus procesos, existe una corresponsabilidad de todos ellos para generar realmente un impacto en el freno al cambio climático. Las acciones para cuidar el medio ambiente no es una tarea individual, es un trabajo conjunto que requiere del compromiso y el trabajo de todos.

El tiempo de actuar es ahora. ¿Te unes?

  BIBLIOGRAFÍA SELECTA RECOMENDADA 

(1) Informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano/ Estocolmo, 6 a 16 de Junio de 1972/ Nueva York, 1973/ Naciones Unidas.

(2) El mundo ha perdido el 14% de los arrecifes de coral a causa del aumento de la temperatura del mar/ 5 de Octubre de 2021/ Noticias ONU/ Naciones Unidas

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