Este año 2021, seguramente será recordado por su intensidad electoral por la cantidad de elecciones que se llevaron a cabo, así como un primer ejercicio de participación ciudadana a nivel federal. De entrada, en junio de este año, a nivel federal se renovó la Cámara Federal de Diputados y Diputadas, 300 por el principio de mayoría relativa y 200 de representación proporcional.

A nivel local, todas las entidades federativas tuvieron elecciones en las que renovaron diversos cargos de representación popular destacando que en 15 entidades se eligió a el o a la gobernadora; en 30 Estados hubo elecciones para elegir a las y los legisladores locales que significó 642 por mayoría relativa y 421 por representación proporcional. Asimismo, en 30 entidades federativas se renovaron las autoridades de los Ayuntamientos que conforman las entidades respectivas, esto significo la elección de 1,923 presidencias municipales; 2,057 sindicaturas, así como 14,222 regidurías. Finalmente, estuvieron en disputa 635 diversos cargos correspondientes a juntas municipales y concejales.

Este gran universo de cargos que se disputaron en 2021 constituyó la elección con el mayor número de espacios a competir en una elección concurrente, pues más de 20 mil cargos estuvieron en juego.

Pasadas las elecciones, tan solo dos meses después, se llevó a cabo el primer ejercicio de participación ciudadana a nivel federal; ejercicio que deja muchas lecciones y que constituirá un primer eslabón para la implementación de este tipo de mecanismos conocidos como de democracia directa.

Derivado de diversas circunstancias, principalmente en atención a diversos medios de impugnación presentados por los actores políticos que participaron en la contienda electoral y que recurrieron a los distintos órganos jurisdiccionales respectivos, hubo elecciones extraordinarias en diversas entidades del país como en un municipio del Estado de Nuevo León; un municipio del Estado de Yucatán; un municipio en el Estado de México; un municipio en Jalisco; cinco municipios del Estado de Tlaxcala, y un municipio en Guerrero todos registrados en diversos domingos del mes de noviembre. Asimismo, hubo una elección extraordinaria en un municipio del Estado de Nayarit en el mes de diciembre.

A nivel federal se efectuó una elección extraordinaria en el Estado de Nayarit para la elección de una senaduría en diciembre.

Como podemos observar, este año ha sido muy complejo por el número de elecciones que se han registrado. Por si fuera poco, en 2022 tendremos elecciones, al igual que en 2023 y 2024.

Para 2022, si se alcanzan las firmas para la solicitud respectiva por parte de la ciudadanía, se llevará a cabo en el mes de abril un ejercicio novedoso en nuestra democracia mexicana conocido como Revocación de Mandato para la figura del Presidente de la República.

Además, se celebrarán elecciones en seis entidades federativas: Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. En estos seis Estados se renovará el ejecutivo local y en el caso de Durango, además, se renovarán las autoridades de los 39 Ayuntamientos que integran dicho Estado y en Quintana Roo se renovará el Congreso local.

Bajo este contexto, los procesos electorales en México son permanentes, dinámicos y han permitido la renovación pacífica e inclusive la alternancia en algunos casos del poder público.

Lo que sigue y que queda en manos del Legislativo es que, en la búsqueda por alcanzar mejores índices de participación de la ciudadanía, así como buscar sinergias entre el ámbito federal y local que promuevan ahorros presupuestales, es la de ir conjuntando dichos procesos electorales en una misma fecha tal y como sucedió en este año 2021 con un importante número de Estados.

El Legislativo tiene la última palabra.