Cuarenta y tres días de concentración, para nada son poca cosa; incluso, si se trata de la Selección Nacional. Atípico hasta para una Copa del Mundo, pero mucho más extraño si el inicio del torneo Apertura 2023 (30 junio) se empalma con esas fechas en que el Tricolor disputa la Copa Oro. Doce futbolistas enfrentarán todo lo que se ha llamado “Verano peligroso”, pero 33 son parte total de la convocatoria.
“Que México tenga el mejor Mundial 2026”, dijo el flamante director deportivo de la Selección Mayor, Duilio Davino.
Para eso, la Selección Mexicana requiere de reconciliación con quienes le ha fallado en los últimos tiempos, pero también reestablecer el orden —ahora inverso— con que se hicieron los nombramientos al interior de la FMF: primero se designó al director técnico, para posteriormente nombrar al director deportivo y al presidente del propio organismo.
Seamos claros: México vive una de las peores crisis de Selección en su historia. Parece que nada realmente drástico sucedió tras el papelón en la pasada Copa del Mundo en Qatar y, por el contrario, se perdió tiempo valioso en decisiones que indiscutiblemente debían tomarse.
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Sin embargo, ahora —de manera increíble— el director técnico de la Selección, Diego Cocca, sufre por su permanencia en el cargo, desde el primer minuto que dirigió en Paramaribo, aquel 23 de marzo.
México disputó, el miércoles por la noche, el primero de aproximadamente una decena de partidos que tendrá este verano. El primero de ellos oficial, será este 15 de junio en Las Vegas, contra Estados Unidos.
En lo personal, considero que es un partido crucial por los siguientes motivos: México perdió este torneo (Nations League) ante su principal rival hace dos años, en una de las mejores finales que se recuerden. Esta vez, el Tri ha incrementado su presión, debido a que no ganó su partido en el Estadio Azteca frente a Jamaica; por lo tanto, debe enfrentar a Estados Unidos en semifinales. De ganar, tendría la misma obligación para la final, contra Canadá o Panamá.
Una nueva derrota de México ante Estados Unidos (la quinta oficial en fila), pondría a Diego Cocca en el paredón de la crítica, con el torneo más importante de Concacaf pocos días más tarde: la Copa Oro, misma que también perdió contra los estadounidenses en 2021.
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El pasado miércoles, México derrotó a Guatemala (2-0) en Mazatlán, en uno de los dos partidos de preparación para la semifinal de Nations League.
Lo incomprensible es que Cocca utilizó jugadores que no estarán en la semifinal de la Nations League, para un partido que el mismo director técnico solicitó.
Cuarenta y tres días de concentración, 43 días de un “verano peligroso” para la Selección Nacional y todos los que, directa o indirectamente, trabajamos alrededor del futbol mexicano. Hagamos el primer recuento después del 15 de junio.
