Así son las palabras escritas en el aniversario 108 de El Gran Diario de México, por su Presidente Ejecutivo y del Consejo de Administración, licenciado Juan Francisco Ealy Ortiz.
Cuanta razón tiene ese mensaje que apareció en las páginas de este rotativo, el día que protestó como Presidenta la Dra. Claudia Sheinbaum. En su mensaje invitó a la unidad, a dejar atrás las diatribas y los enfrentamientos que desafortunadamente presenciamos cotidianamente en el gobierno anterior.
Palabras certeras cuando afirma que deben escucharse todas las voces y no pretender avasallar con la mayoría alcanzada. Mensaje patriótico en donde con sutileza expresa su preocupación por la división de poderes.
Palabras que escritas por un hombre que brillantemente ha consagrado su vida al periodismo, son un mensaje inspirador para todos.
Esperemos que las escuche, las atienda y se oriente con ellas la Presidenta, será por el bien de México.
El país vive momentos difíciles en distintos órdenes, que fue gobernado, y en esto discrepo totalmente de lo afirmado por la doctora Sheinbaum, por un mal Presidente, y no como ella lo calificó como “el mejor que hemos tenido”
Se describió como una mujer cuya vida personal le da la visión completa de la ideal vida familiar, como también de una científica que con su preparación sabrá tomar las mejores decisiones.
Y a pesar de que en su discurso no mencionó a la oposición, e incluso según se escuchó en los medios, pidió que la comisión de legisladores que la recibió solo fuera de militantes de su Partido, espero en honor a la democracia en la que dice creer, modifique radicalmente esa postura, y tenga presente que es Presidenta de todos los mexicanos, no solo de sus compañeros de filiación política.
Que no vuelva a expresar “viva la cuarta transformación”; en lo privado por supuesto que puede hacerlo, pero no en los actos públicos es correcto que haga propaganda política.
Entiendo bien su gratitud para López Obrador, y por eso se explican las múltiples menciones encomiásticas en su favor. Pero no es adecuado, así lo miro, que se solidarice con ideas tan absurdas como insistir en que el gobierno de España pida perdón por lo acaecido hace más de 500 años.
Podría llenar muchas hojas con diferentes observaciones, como expresarle con respeto, como estoy haciendo todas estas alusiones, que no piense en gastar dinero para comprar aviones para una línea comercial, hay necesidades urgentes y superiores a querer competir con las líneas comerciales.
Enhorabuena que en un acto de civilidad de educación, saludo a la digna Ministra Presidenta de la Suprema Corte, lástima que innecesariamente, desde esa tribuna calificó al Poder Judicial, como si en los otros Poderes, lamentablemente, no hubiera corrupción.
Tal parece que esa desafortunada manifestación la hizo porque el Presidente saliente ha manifestado su animadversión por ese Poder, sin importarle la vulneración hecha con la llamada reforma judicial.
Recibió la simbólica Banda Presidencial de una mujer brillante y con una admirable trayectoria, nuestra querida y admirada Ifigenia Martínez.
Como bien dice el licenciado Ealy Ortiz, México inicia una etapa de promesas, proyectos y aspiraciones, como desafíos y peligros.
Confiamos que ella sí pueda ser una gran Presidenta y que cuando al iniciarse el siguiente sexenio, quien le suceda lo diga, estemos de acuerdo en su apreciación.
Profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM