Ese grito que caracteriza el entusiasmo universitario, dicho con emoción lo mismo en eventos deportivos que académicos, tiene un origen antiguo y festivo. Por los años cuarenta, la vida universitaria se concentraba en el centro de la ciudad de México, y cuando los estudiantes decidían no asistir a clases comenzaban a gritar “Goya” , en alusión a un cine ubicado cerca de las instalaciones universitarias; ese grito se fue popularizando y ha llegado hasta nuestros días como una expresión de nuestro orgullo, satisfacción y alegría de ser universitarios.
Por eso, con el orgullo de ser integrantes de esta Casa de Estudios, expreso con fuerza esa porra desde la Ciudad Universitaria hasta Palacio Nacional.
Lo hago, porque recientemente el Presidente de la República, a quien me dirijo con el mayor respeto a su investidura oficial, en su conferencia matutina tuvo, desafortunadas expresiones sobre las universidades.
No especificó a cuales hacía alusión, sin embargo voy a referirme a la Nacional Autónoma de México, de la que tanto él como yo somos egresados, para mencionar algunos datos que considero solo merecen el aplauso y el orgullo nacionales, como el reconocimiento internacional ganado.
Expresó López Obrador que “las universidades fueron tomadas por el conservadurismo, por la derecha” Lo sabemos, utiliza esos términos para criticar a las personas físicas o colectivas.
Nada más que en este caso, la afirmación presidencial se encuentra totalmente equivocada por las consecuencias que él atribuye se presentan con el “conservadurismo y la derecha”.
Esta Universidad, Presidente, en la que usted se formó, recuerde primero, que es autónoma, y salvo el licenciado Díaz Ordaz, bajo condiciones muy especiales que confiamos nunca vuelvan a presentarse, tuvo que intervenir, recibe ahora de usted el anuncio, o quizá amenaza de que “hay que agitar sobre estos temas” (el conservadurismo y la derecha)
Ignoro porque no lo preciso, desde cuando según usted, fueron “tomadas” por esas fuerzas negativas.
Ahora es conveniente precisar, que de nuestra Universidad, han egresado los tres Premios Nobel obtenidos por mexicanos; que todos los mexicanos galardonados con el Premio Cervantes, el más importante otorgado de lengua castellana, fueron universitarios; que en 2009 recibió el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades.
Tengamos presente también, que ofrece más pregrados, grados y posgrados, que cualquier otra institución en México. Tiene además tres bachilleratos, el de la Escuela Nacional Preparatoria, el del Colegio de Ciencias y Humanidades y el bachillerato a distancia.
Existen en nuestra Universidad, 25 carreras técnicas, 130 licenciaturas en 176 opciones educativas, 40 programas de posgrado con 90 planes de estudio de maestría y doctorado, como también 34 especializaciones con 194 orientaciones.
Y no obstante Señor Presidente, al bajo porcentaje del PIB que se invierte en investigación, nuestra Universidad se distingue por sus investigaciones con competitividad a nivel internacional en todas las áreas del conocimiento; es la institución mexicana pública o privada, con mayor infraestructura e inversión en investigación básica. Algunos estudios le atribuyen más del 50% de la producción científica de México
En tal virtud, Presidente si lo que afirmó usted de haber sido tomada esta Universidad por “el conservadurismo y la derecha”, ha dado buenos frutos en la misión fundamental que tiene nuestra universidad: docencia, investigación y difusión de la cultura”
