Cuando se menciona al teatro Degollado, implícitamente se tiene que mencionar a Guadalajara y su historia. Precisamente este antiguo y bello edificio que inició su construcción en 1856 y que finalmente fue inaugurado el 13 de septiembre de 1866, justo 10 años después de que el arquitecto tapatío Jacobo Gálvez colocara la primera piedra, ha albergado opera, teatro, recibido a los niños cantores de Viena, e infinidad de eventos culturales y folclóricos, además de ser actualmente la casa de la Filarmónica de Jalisco, pero nunca nos habríamos imaginado que el Degollado albergaría un pesaje de boxeo y solo Canelo lo pudo lograr.
En el bello e histórico edificio se dio cita la prensa mundial y local para cubrir el pesaje de Canelo vs Ryder, era muy extraño ver lo elegante del recinto, combinado con uno de los deportes mas populares en el mundo, el boxeo, vamos, se unieron bajo un mismo techo, el arte y el deporte.
Tanto Canelo como Ryder vencieron a la báscula, dando 167.5 y 168 libras respectivamente, tanto el mexicano como el del Reino Unido se declararon listos para una guerra en el cuadrilátero que se instalará en el corazón del estadio AKRON, la casa del “Rebaño sagrado”, la casa de las Chivas rayadas del Guadalajara.
Algo que me impresionó todavía mas, fueron los mares de gente y prensa que acompañaron a Canelo rumbo a su partida a casa, era inexplicable como la prensa se amontonaba buscando una declaración y muy impactante también la enorme cantidad de tapatíos que buscaban una foto, un autógrafo, algún recuerdo del Canelo, la raza que por cierto, aguantó un sol infernal que caía a plomo, le gritaban con todo a Saúl, querían sentir de cerca a su ídolo, querían sentir de cerca a su Canelo.
Se que es muy importante para una estrella como Saúl Álvarez el tener el reconocimiento mundial, pero me queda claro que con el amor que ha recibido en su natal Guadalajara, le basta y le sobra.
Canelo cambió el dinero por el amor a su patria, por el amor a su Guadalajara y esto seguramente será recordado generación, tras generación. Lo cierto es que esta pelea de Canelo vs Ryder ha tenido un saborcito muy distinto, un saborcito a México, un saborcito a Jalisco, un saborcito a Guadalajara, sin duda esto es muy cálido, muy familiar y sumamente histórico.
Créanme que la noche del 6 de mayo será recordada por siempre, por el simple hecho de que Canelo optó por el amor a su gente, antes de optar por el dinero y eso vale mucho.