El presidente de México invitó, el pasado miércoles, a un selecto grupo de visitantes a conocer la Sala Daniel Cabrera en Palacio Nacional , que alberga el espíritu del hombre que fuera creador y director del periódico El Hijo del Ahuizote. López Obrador estaba ahí, orgulloso, ostentando el lujo de la sala que lleva el nombre de Daniel Cabrera, quien sacaba de sus casillas al presidente Porfirio Díaz , mediante una crítica sostenida, dura, frontal y aplaudida…
Cabrera enfrentaba al todopoderoso presidente Díaz, día con día. Parecía que López Obrador no recordaba aquellas críticas y sus consecuencias.
El presidente de la austeridad, hoy habitante de Palacio Nacional, se mostraba satisfecho en la Sala Daniel Cabrera.
¿Pretendía dejar de lado las críticas que frecuentemente recibe y que lo hacen rabiar hoy? Daniel Cabrera hilaba y mantenía una crítica áspera y valiente frente a Porfirio Díaz. Su espíritu, con El Hijo del Ahuizote, está ahí, en aquella Sala de Palacio.
La crítica periodística hoy se mantiene, a pesar de amenazas y de asesinatos de periodistas como nunca antes en México:
Recordamos día con día que van cinco periodistas asesinados en lo que va del año 2020, y que la violencia y los asesinatos de periodistas es mayor que nunca hoy, en la historia de México. La crítica sobre lo que acontece trasciende fronteras.
