1.El viejo tigre que soltó Madero para ultimar al zorro decrépito de don Porfirio, sigue aquí, renacido, con muchas ganas de atacar, como el depredador de depredadores que es, muy parecido al Orlando de Virginia Woolf que sin perder su esencia y su destino letal, es capaz de sobrevivir al tiempo y a las trampas.
2. El tigre sigue aquí. Si no ¿qué indican pues los miles de muertos y desaparecidos, las más de 200 organizaciones de madres buscadoras de sus hijos, despreciadas y hasta perseguidas por el gobierno?
3. El tigre sigue aquí, porque la bandería que quiere retener el poder se distrae todo el tiempo en la trata de ayudas y de votos para continuar con la división, la impunidad y la rapiña, en medio de una retórica de quinto patio y una mitomanía sin par.
4. Por ello #EsClaudia está, con todas las pesas y pesos del Estado, en la vía de la más trastabillante imposición, como lo acabamos de ver con su coronación autoritaria que hace tres días hizo rugir al felino. Alguien, desde Palacio nacional, obseso de poder hasta gritar ¡basta!, pidió, imprudente, exhibicionista y temerario, que le rascaran un poco los huevos al tigre en son de prueba.
5. Y el agravio político de la coronación de quien prefiguran como presidenta nopalita resultaría grave no sólo para Marcelo Ebrard sino para una buena cantidad de mexicanos que lo secundan porque creen en un país con un futuro diferente.
6. Escribió el gran poeta mexicano Eduardo Lizalde: “Hay un tigre en la casa / que desgarra por dentro al que lo mira. / Y sólo tiene zarpas para el que lo espía, / y sólo puede herir por dentro / y es enorme: / más largo y más pesado /que otros gatos gordos /y carniceros pestíferos / de su especie, / y pierde la cabeza con facilidad, / huele la sangre aun a través del vidrio, / percibe el miedo desde la cocina… (El tigre en la casa.)
7. Presidente López Obrador: por patriotismo, por cordura, por responsabilidad política, no siga usted perdiendo la cabeza con tanta facilidad. Que su gobierno no le siga rascando los huevos al tigre porque, después, ¿quién podrá con él?
8. Después de entregarle el “bastón de mando” a ELLA, lo que denigró a las comunidades indígenas, si usted se dedica volcar el aparatote del Estado y del bienestar en la campaña, la ciudadanía habrá de rechazarle, paso a paso, a usted y a su corte por las provocaciones al felino que ustedes han venido relizando desde 2018.
9. ¡Que no le rasquen más los huevos al tigre!
10. Al momento de su última reelección, después de su ya decadente mandato, al no entender que la necesidad orgánica era la de pasar a nuevas instituciones y formas de convivencia política y social, Porfirio Díaz le daría un santo mandarriazo a los testículos del rayado felino nacional que nos llevarían a 10 años de guerra civil.
11. El tigre está aquí.
12. Después de tanta agresión, de tanta dejadez, de tanto abandono de gobierno ¿Qué esperábamos? ¿Sedosos gatitos siameses adornando los muy largos y lustrosos pasillos de Palacio?
13. "Madero ha soltado al tigre, vamos a ver si puede domarlo", dijo Porfirio Díaz poco antes de abordar el Ipiranga que lo llevaría al exilio.
14. Y el tigre sigue aquí.