Es momento de darle lugar al gran proyecto y el equipazo que se ha formado en la Sultana del Norte.
Vivimos días de clics fáciles, de ganar seguidores e interacciones en las redes sociales, donde —desde hace unos años— varios están atorados con la batalla de la Ciudad de México contra Monterrey.
Sin duda, gracias al billete y los proyectos sólidos que le han metido a Tigres y a Rayados, lo que se vive en nuestra Liga MX depende mucho de ellos últimamente.
Y ojo, tampoco caigo en las trampas de mis colegas regios, porque —como lo he expuesto acá en repetidas ocasiones— tenemos un torneo que desde hace 10 años es controlado por cuatro clubes (Monterrey, América, Tigres y León), pero le entran a la batalla por el título otros cinco equipos (Toluca, Cruz Azul, Pachuca, Santos y Atlas).
Por eso, ante tanta democracia en nuestros puestos de honor, podemos resaltar que en El Barrial —después del buen proyecto en dos etapas del Turco Mohamed, vino lo que hicieron Diego Alonso y el Vasco Aguirre—, han reestructurado sus visiones y han generado con Víctor Manuel Vucetich un equipo que está rompiendo la Liga MX, así como en la Femenil, y hasta en la Liga de Expansión han logrado pelear a tope con sus equipos.
Hoy, son los candidatos indiscutibles al campeonato, pero también están edificando —con un atractivo cambio generacional y varios mexicanos en la cancha— un sólido plantel que vuelve a conectar con su afición.
Una muestra, fue que por fin volvieron a ganar en el Volcán y ahora llegan al juego contra el América como favoritos, con una ventaja de puntos que seguro les permitirá este fin de semana —a falta de tres partidos por disputar— amarrar el primer lugar de la clasificación. ¡Una locura!
¡Bienvenidos, bienvenidos! A los días de los poderosos Rayados.