Se acerca el inicio de la famosa Leagues Cup y es imposible no pensar en cuáles son los equipos que se perfilan como amplios candidatos al título.

Las Chivas de Paunovic son el equipo que mejor juega en el futbol mexicano y, más allá del liderato en la Liga MX, el Rebaño ha encontrado un sistema bastante reconocible, priorizando el ataque, con gente hecha, en su mayoría, en Verde Valle. Identidad.

El LAFC no puede pasar desapercibido. El descaro de Ilie Sánchez en la media, con la potencia de Cifuentes, la calidad de Vela y la efectividad de Bouanga, hacen que el equipo de Cherundolo sea una amenaza para cualquiera. Será muy ameno ver al club angelino en este certamen. Agresividad.

Tigres, actual campeón de la Liga MX, ha sabido encontrar el equilibrio entre los jugadores veteranos y la sangre joven. En un torneo internacional y de poca duración, la experiencia es fundamental. Este puede ser el verdadero Last Dance de la dinastía. Calidad.

Los Rayados del Monterrey cuentan con una de las nóminas más envidiables, no sólo en la Leagues Cup, sino de todo el continente. De la mano de Ortiz, se puede recuperar la propuesta ofensiva que tanto tiempo ha pedido el aficionado. Fortaleza.

El Seattle Sounders, históricamente, ha sido un rival incómodo. En la pizarra de Brian Schmetzer hay mucho futbol. Joao Paulo otorga un músculo impensado en el medio campo y un viejo conocido, Raúl Ruidíaz, sigue con el arco dibujado, tal como lo hacía cuando jugaba en nuestro país. Peligro.

El América siempre es candidato y, con la llegada de Kevin Álvarez, se reforzó el sector que más le dolía al equipo. Lo de Quiñones es punto y aparte; es decir, el azulcrema amenaza con quitarse los fantasmas que en los últimos años han ocasionado que se quede en la orilla. Grandeza.

El Filadelfia Union pasa por un buen momento en su conferencia. Pasan los años y Bedoya sigue firme en la cancha. La experiencia del mediocampista estadounidense genera confianza dentro del tapete verde para los Zolos. En el arco tienen a Blake, portero de Jamaica, que dejó muy buenas sensaciones en la Copa Oro. Resiliencia.

El Cincinnati FC es un equipo alegre dentro del campo. Juega y deja jugar. Con Brandon Vázquez, el gol no es un problema que tenga actualmente. Lucho Acosta agita las líneas de pase y controla el juego a su antojo en el último tercio. Cuidado con el líder de la Conferencia del Este. Velocidad.

¡Bienvenidos, bienvenidos! A los tiempos de la Leagues Cup.

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