O sea, lo mismo. Mismo discurso. Mismas ideas. De ida y vuelta. Ayer, me topé con mi primera decepción sobre lo que se está trabajando en nuestra
. Entendiendo que Roma no se hizo en un día o que nuestra Liga lleva rato más confundida que un adolescente en pandemia, es un hecho que los “cambios” anunciados ayer fueron de forma y no de fondo. La muestra es regresar a reglas ya practicadas por nuestro futbol, como reducción de extranjeros o el mentado gol de visitante, que le daba mucha emoción a nuestra Liguilla .
Habían prometido una reestructura para mejorar —semana a semana— el espectáculo que se ha perdido, y más en tiempos del Covid-19 , en nuestras canchas. Honestamente, tampoco entendí el aumento de un año del castigo financiero para no descender; es decir, no hay aún un verdadero trabajo para desarrollar a la Liga de Expansión .
Así, podrán venir y anunciar nuevos inversionistas y capital extranjero en nuestros clubes, pero —de no tener claridad en los fundamentos de nuestra competencia— de nada servirá tener al flamante campeón español, el Atlético de Madrid , en San Luis Potosí para convertirlo en el Club de Cuervos de verdad.
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En pocas palabras, creer y caer en la distracción que el gol de visitante que se anula en la Liguilla es el trabajo de Mikel Arriola , hará que extrañemos más rápido a Decio de María , y la verdad es que a nuestro futbol le urgen ideas nuevas, proyectos serios y una Liga que apriete a los socios para evolucionar y no regresar a ideas que ya se usaron y no funcionaron.
Tampoco es que haya un hilo negro, sólo es cuestión de ser honestos con la pérdida generalizada de interés por la poca transparencia y seriedad que le damos jornada a jornada, y no sólo por cuatro semanas a cada torneo, o uno de cada seis meses, no sirve para creer que están trabajando.
¡Bienvenidos, bienvenidos! A una Asamblea más de Dueños en la que el presidente de la Liga sale a decir las mismas chin...eras.
@EnriqueVonBeas
