Y miren que esto lo escribo en la antesala del Puebla vs América, en un ambientazo, de los que mueven y generan altas emociones. Pero vamos al grano: he tenido la oportunidad de estar en muchos clásicos de nuestro país e internacionales.
Memorias que están tatuadas en el sueldo de mi alma, en mis recuerdos. Por eso, lo que se juega hoy en el Akron y el domingo en el Jalisco será una de esas citas de la Liga MX que dejarán el alma de Guadalajara en la cancha.
No hay duda de que la ciudad más futbolera, por tradición e historia de muchos clubes, es la bellísima Perla de Occidente.
Ahí, su mayor representación se vive de rojo y negro o rojo y blanco. El buen trato de pe lota, las canteras mas fructíferas de México, el de los puros mexicanos, el de los millonarios de la plaza, el del orgullo del pueblo, el de la eterna aspiración del poder de la ciudad, el de Alejandro Fernández contra don Vicente (qepd), el del Chicharito, el de Rafa Márquez, el del mariachi, la banda, las ahogadas, los duros, los cueritos, los cantaritos, el del Canelo, el del tequila, el más viejo y añejo, el de Oswaldo Sánchez, el Bofo, el Chato Rodríguez, Guardado, Bravo, Vega, Rocha, Cocca, Cadena, los socios que se fueron, Vergara, Irarragorri.
El estadio más moderno y el que se mueve hasta las entrañas para no brincar en la parte alta. El de Jalisco.
Sí, hoy se juega una rivalidad que ha sobrevivido la era amateur, la de torneos a puntos, los descensos, el Campeonísimo, los torneos cortos, los caprichos de una promotora y, recientemente, de un cineasta.
El clásico que se ha gozado desde hace más de 100 años. El que le da sabor a la región donde mejor se juega.
¡Bienvenidos, bienvenidos! Al clásico más pasional de Mexico: el Chivas vs Atlas.
@EnriqueVonBeas
