La Fecha 7
, en nuestra Liga MX , sin duda es el bautizo para la nueva dirigencia.
Apenas estaban presumiendo los datos bien trabajados del Covid-19 , así como el reporte de todas las visitas a los clubes profesionales de Primera División, cuando les reventaron en la cara dos temas trascendentales para demostrar los nuevos tiempos, en aras de la transparencia necesaria.
Sin duda, dos bombas que iban directo a explotarles en Toluca, en esas oficinas preciosas, primermundistas, de cristales gigantes, donde todos se pueden ver a los ojos. Preciosas instalaciones, pero con la misma ejecución —al parecer— de siempre.
Pero vamos por partes. En el Atlético de San Luis vs Santos, hay dos posturas entre directivas: la que dice que hay racismo y la que dice que sembraron el tema. Así de delicado es, sea cual sea el resultado de la investigación, porque se demuestra el poco valor ético con el que se trabaja el futbol profesional en nuestro país, ya que el tema del racismo es delicado y por ningún motivo debe seguirse permitiendo, mientras que el otro raya en la imprudencia total de crear un montaje para generar un castigo.
Mas allá de la calentura de un partido, la Liga requiere demostrar qué pasó y justo atacar cualquiera de las dos malas prácticas expuestas.
La segunda fue igual de delicada, pero la Disciplinaria la resolvió de la mejor manera, al quitarle los tres puntos al América.
Urge darle claridad a la toma de sanciones, para dar confianza; es cierto que es cansado tener tantos líos y dar la apariencia de que los medios de comunicación preferimos estos temas que lo que pasa en la cancha, pero —si no podemos resolver los manejos y el término clave de nuestros días: la transparencia de las reglas y las conductas, así como los recursos de esta industria—, seguiremos separando a las nuevas audiencias y nuevos aficionados por falta de credibilidad.
¡Bienvenidos, bienvenidos! A los días turbios de nuestra amada Liga MX.
@EnriqueVonBeas
