Amable lector: Dada la importancia de los valiosos comentarios a este seguimiento periodístico, la presente entrega la iniciaremos, justamente, con dos de ellos muy interesantes. El primero lo envía Alfredo Fernández: -Se puede entender y justificar la prohibición del glifosato y de una vez de otros herbicidas e insecticidas, pero ustedes que abogan por eso y hasta proponen una consulta popular nos deberían explicar las consecuencias de tal prohibición. ¿Ya vio el precio del maíz? Repito, entiendo sus argumentos, pero estamos en el entendido de que dejar de usar agroquímicos puede causar hambruna. Perdón, pero, dejar que gente que no conoce el tema vote en una consulta popular puede ser peligroso.

Tengo casi 40 años trabajando en la industria alimentaria, y aunque no justifico algunas prácticas, tampoco las satanizo. Analice, si llevamos casi 40 años consumiendo productos “contaminados” con glifosato y es tan tóxico, ¿por qué seguimos vivos? Entiendo que puede haber implicaciones ecológicas, pero mientras no encontremos una alternativa creo que seguirá siendo un mal necesario. Y, perdón, pero la solución está en la ciencia y la tecnología y no regresar a vivir en cuevas y vivir recolectando frutas silvestres y raíces. ¿A cuáles de nuestras comodidades estamos dispuestos a renunciar? Ciertamente don Alfredo, todavía estamos vivos, pero varios miles más están padeciendo algún tipo de enfermedado cáncer-por estas consecuencias. Lamentablemente, muchos enferman y no saben por qué. Afortunadamente no hemos muerto todos, usted y yo todavía vivimos, pero cuánto sentimos por aquellos que han partido por esto . Desde luego que someter a consulta un asunto de esta naturaleza no es lo indicado. No se trata de eso, Pero algo se tiene que hacer para evitar enfermarse por no contar con un organismo sano en base a alimentos naturales. Pensemos en los niños.

No es un mal necesario, Don Alfredo, porque se trata de la salud y la vida de todos. Tampoco se trata de renunciar a comodidades, sino de buscar, hasta encontrar, las alternativas científicas y tecnológicas aplicadas racionalmente para una mejor calidad de vida en base a la producción de alimentos sanos, hasta lo posible; y eso compete a todos. Existen muchas alternativas, pero se necesita de visión y voluntad política de las autoridades, y desde luego de la agroindustria para proceder cuanto antes. Estamos seguros que muchas empresas estarían dispuestas a participar si así se les solicitara. Tengamos presente que el maíz transgénico-según el expediente científico del CONACYT- produce moléculas que desencadenan reacciones alérgicas y radicales libres que promueven el estrés oxidativo asociado con diversas enfermedades crónico-degenerativas como la diabetes y el cáncer. Lamentablemente, muchos enferman y no saben por qué . Difícil de reconocer, y mucho menos aceptar, que una simple tortilla o una fruta puede ser el detonante de cualquier tipo de enfermedad. Si más de 95 mil niños mueren al año por consumo de agua contaminada, en Jalisco niños recién nacidos orinan pesticida y el glifosato 2 ya está en casi todos los alimentos, y hasta en el agua, no es para preocuparse y tomar las medidas pertinentes, pues…

Luis Ángel González Méndez: Su desorganizada y torpe forma de corporizar y tratar de dar contexto al “artículo” (digno de un pasquín alarmista) hace que se pierda el interés de un tema de suyo tan importante. Parece que estoy leyendo un artículo de “El Sol de Walawices”. Extraordinario su comentario Luis Ángel, solo que la noticia y la información científica y tecnológica no tienen “ estilo periodístico ” y se publican tal cual son. Le estamos dando seguimiento a una información relevante y no escribiendo una novela. Tampoco nos ocupamos de alabar a políticos perversos que se valen de la ignorancia del pueblo para adoctrinarlo a modo. Qué bueno que se alarme, de eso se trata. Por favor: ¿Cuál es su propuesta a esta problemática?.

Expediente Científico del CONACYT sobre el glifosato. Parte 4-Debido a que esta página, que era de donde retomábamos esta información, al parecer, ya fue bajada, la rescatamos de una publicación del diario La Jornada.- José Antonio Román-10- 08-20.- Este expediente del CONACYT se presenta en medio de las posiciones encontradas que han manifestado diversas organizaciones agropecuarias, de productores, de campesinos y no gubernamentales en torno al anteproyecto de decreto presidencial sobre el herbicida del presidente Andrés Manuel López Obrador publicado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) El expediente expone las afectaciones ambientales y los daños a la salud relacionados con la exposición al glifosato, así como el uso y consumo de transgénicos.

Así mismo, muestra también los resultados de investigaciones científicas que han confirmado la presencia de glifosato en los fluidos corporales de niños, adolescentes y adultos en nuestro país. Así como en alimento elaborados a base de maíz. También se ha detectado glifosato en fluidos de la leche materna, sangre y orina de agricultores y sus familias a nivel mundial. Y en México, hasta ahora, en comunidades de Yucatán, Campeche y Jalisco. El caso más reciente es el de la comunidad de El Mentidero, en el municipio de Autlán, Jal. donde se analizó la orina de 93 niñas y niños de preescolar y primaria y 53 de secundaria. Cien por ciento de las niñas y niños tuvieron rastros de herbicidas en su orina, y la sustancia más recurrente y peligrosa encontrada fue el glifosato.

Este expediente científico también señala que se ha reportado la presencia de glifosato en aguas costeras de la Península de Yucatán en zonas agrícolas. Así como en agua subterránea y en agua para beber en comunidades como Hopelchén, Campeche-donde están los menonitas- y en cuerpos de agua en Chiapas, algunas de estas al interior de Áreas Naturales Protegidas (ANP) Agradecemos a la Lcda. Carmen Lira Saade, directora de la Jornada, su apoyo a este seguimiento periodístico.

Recordatorio. - El fluoruro ha pasado de ser un problema de fluorosis dental y daño esquelético, a ser asociado con daño a las neurotransmisiones, es decir, daña la comunicación entre neuronas, reduce el coeficiente intelectual entre 40 y 50 por ciento. Los niños dejan de aprender irreversiblemente. Recuerde que el arsénico y 3 el fluoruro se encuentran en el agua extraída de los pozos a mayor profundidad. ¿Sabe usted si el agua embotellada que consume, proviene de pozo o de manantial? Continuará…

diegoalcalaponce@hotmail.com

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