Nos dicen que, al parecer, es una tendencia mundial que la población no acepte billetes de alta denominación. En México son rechazados de inmediato los de mil pesos, emitidos por el Banco de México (Banxico), de Victoria Rodríguez, pues es muy difícil dar cambio o se duda de su autenticidad. De ahí su baja circulación, con apenas 376.4 millones de piezas en junio y, entre ellas, mil 724 falsificadas. En Estados Unidos también es común ver letreros en negocios, sobre todo cafeterías, en los cuales se avisa que no se admiten billetes de 100 dólares, que actualmente circulan con la figura de Benjamin Franklin. Por cierto, nos dicen que en Banxico aún está vacante la Dirección General de Emisión, que dejó Alejandro Alegre, quien era el encargado de la fábrica de billetes de Legaria y cajero principal.
Altagracia, clave ante el nearshoring
Nos comentan que Francisco Cervantes Díaz, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), mandó señales positivas al empresariado al considerar que fue un acierto el nombramiento de Altagracia Gómez como coordinadora del Consejo Asesor Empresarial, por parte de la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum. Una misión principal de la empresaria jalisciense será la consolidación del fenómeno de relocalización de inversiones, mejor conocido por la palabra en inglés nearshoring. Ante ese objetivo, nos dicen que Cervantes ha expresado que Altagracia será un factor clave para que se concrete el trabajo con miras a atraer esos capitales al país, lo que se traducirá en un mejor desempeño del sector productivo, además de que se reflejará en la generación de empleo en el territorio nacional.
Pemex: ¿más opacidad?
Nos reportan que Petróleos Mexicanos (Pemex), a cargo de Octavio Romero Oropeza, está incumpliendo una obligación de transparentar la información sobre su desempeño presupuestal. Resulta que la petrolera no ha entregado todavía su Informe de Austeridad Republicana del ejercicio 2023, que debe presentar tal y como lo señala la ley federal en la materia, creada por este gobierno en 2019. Nos recuerdan que en el reporte correspondiente a 2022, más que describir un sistema transparente de rendición de cuentas y con una planeación adecuada para evitar los gastos innecesarios, se percibió una administración no tan propensa a gastar menos, en tanto que el ejercicio de los recursos se caracterizó por las adjudicaciones directas, así como también procesos de contratación improvisados