La agenda feminista se ha posicionado como un tema de constante discusión y debate en la opinión pública mexicana. Para el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, las conferencias de prensa diarias se han convertido en su instrumento de comunicación favorito. Con un promedio de 107 minutos de duración diarios, el Presidente utiliza las conferencias para posicionar los mensajes que resultan relevantes para el gobierno y contestar las preguntas de los medios de comunicación en Palacio Nacional. Sin embargo, el movimiento feminista y el actual gobierno han mantenido una relación complicada.

La asistencia y participación de los funcionarios públicos a la conferencia matutina resulta esencial para dar visibilidad a la transparencia y la rendición de cuentas dentro del mismo gobierno. De acuerdo con las cifras de SPIN al 5 de marzo de 2021, de los 508 asistentes a las conferencias, tan sólo 140 de ellos son mujeres. Adicionalmente, de las 140 colaboradoras que han acudido, sólo 82 han hecho uso de la palabra. Siendo así, el 41 por ciento de las mujeres que han asistido a las conferencias no han tenido la oportunidad de participar en las mismas, ya sea en el mensaje principal o en la sesión de preguntas.

Asimismo, a pesar de que el Presidente ha hecho hincapié en la necesidad y trascendencia de un gobierno paritario, las conferencias reflejan una realidad diferente. De los cinco miembros del Gabinete que más han asistido, cuatro de ellos son hombres: Luis Crescencio Sandoval, Rafael Ojeda, Marcelo Ebrard y Jorge Alcocer (ordenados de mayor a menor asistencias). La mujer que se posiciona en el quinto lugar, la secretaria Olga Sánchez Cordero, acumula un total de 66 asistencias y 27 participaciones. En comparación con Luis Crescencio Sandoval, quien ha asistido un total de 119 veces, las asistencias de Olga Sánchez Cordero representan tan sólo el 55 por ciento de las del Secretario.

Las asistencias de todas las mujeres del Gabinete representan apenas el 23 por ciento de las asistencias del Gabinete presidencial. Y, si omitiéramos a la secretaria Sánchez Cordero, las asistencias de las demás Secretarias se reducirían a ser el 15 por ciento. Las desproporciones encontradas en las asistencias y participaciones entre los hombres y mujeres que acompañan al Presidente reflejan la misma desigualdad que perdura hasta la fecha en el sistema político mexicano.

El propio discurso del Presidente no demuestra un reconocimiento al grave problema que es la violencia contra las mujeres. Además de la clara desigualdad entre las y los asistentes de las conferencias, López Obrador ha hecho declaraciones desafortunadas que despiertan duras críticas por parte del movimiento feminista. Durante las 560 conferencias matutinas, el Presidente ha mencionado la palabra “feminista/feminismo” en 82 ocasiones. Sin embargo, 47 de las veces ha sido en referencia a los “conservadores”. Con estas declaraciones, el Presidente ha ligado al movimiento feminista con el grupo que ha criticado a su gobierno.

Durante sus conferencias, el Presidente ha sido cuestionado frecuentemente por la falta de acción del gobierno para combatir la violencia en contra de las mujeres, particularmente el elevado caso de feminicidios que acecha al país. A pesar de recibir 15 preguntas en promedio cada conferencia, la periodista e investigadora Frida Guerrera ha sido una de las corresponsales que más ha cuestionado al Presidente sobre las acciones que ha propuesto para combatir la violencia en contra de las niñas y las mujeres.

Como parte de los cuestionamientos realizados por Frida Guerrera, se le ha solicitado al Presidente que se dedique un día al informe especializado en materia de género. Dada la trascendencia que tienen las conferencias, resultaría imperativa la oportunidad para informar a los ciudadanos sobre este tema. Y, si bien el Presidente dedicó el mensaje principal de 29 de julio de 2020 para hablar acerca de la estrategia nacional de protección integral para las mujeres en situación de violencia, los informes no han sido periódicos.

A diferencia del Presidente, cuando Olga Sánchez Cordero estuvo al frente de las conferencias matutinas, la atención a este tema fue mucho más notable. A raíz de la pregunta que realizó la periodista María Luisa Estrada el 25 de enero, la Secretaria dedicó el mensaje principal del 27 de enero a dar un informe detallado de parte del Grupo Interinstitucional en contra de las Violencias de Género. Para la Secretaria, bastó con una solicitud para traer el tema de nuevo a las conferencias, mismo al que no se le había dedicado el mensaje principal desde el 25 de noviembre de 2020, por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

Con motivo del Día Internacional de la Mujer, las voces del movimiento feminista han resonado nuevamente en Palacio Nacional. La candidatura de Félix Salgado Macedonio al gobierno de Guerrero, así como la defensa e inacción de parte del mismo Presidente, vuelven a demostrar que las demandas del movimiento feminista no son una prioridad. A pesar del supuesto ejercicio de transparencia y rendición de cuentas, las conferencias matutinas han demostrado que cuando se trate de la agenda feminista, el gobierno no puede o no quiere prestar atención.

Relaciones Internacionales, ITAM.
Consultora en SPIN-TCP. 
Tw: @ShDanne 

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