A propósito del Crimen y Castigo publicado el pasado viernes, titulado “Martha Debayle felicita al INAH y la tunden en redes junto a Diego Prieto“, la Dirección de Medios de Comunicación del INAH envía una carta para comentar que, en el marco de los 85 años, ese Instituto “valora las incontables muestras de aprecio y reconocimiento a nuestra labor, que hemos recibido por parte de autoridades, académicos, universidades, estudiantes, dirigentes indígenas, comunidades, cronistas, periodistas y ciudadanos en general que, como Martha Debayle, ven en el INAH a una institución indispensable para conservar el patrimonio cultural de México”.La dependencia sigue: “El INAH es una institución de todas y todos los mexicanos, sin distinciones. Y todas y todos son libres de expresar su entusiasmo, su respaldo o sus cuestionamientos hacia nuestro desempeño institucional o el de cualquiera de nuestros funcionarios, incluyendo al Director General”.Continúa el INAH: “Complace que El Universal se ocupe tan frecuentemente de escrutar la labor del INAH y sus autoridades. Pero sería interesante que lo hiciera con mayor profundidad de análisis y no para dar cuenta de denostaciones sin fundamento”. La carta concluye diciendo que espera que este periódico “contribuya al debate público sobre el patrimonio histórico y la política cultural con altura de miras, alejado de los rumores, las descalificaciones a priori y los chismes de pasillo, que poco contribuyen a dilucidar con argumentos los grandes problemas de la nación”.
Lee también: Martha Debayle felicita al INAH y la tunden en redes junto a Diego Prieto
INAH, entre la frivolidad y la emergencia
Como la dirección del INAH nos da su generosa venia para cuestionar el desempeño institucional de la dependencia, de sus funcionarios y del director, aprovecharemos para preguntar: si valoran todas las muestras de aprecio al INAH, ¿por qué se apresuraron a eliminar de sus redes sociales la cálida felicitación de la presentadora y empresaria Martha Debayle? Nosotros, por cierto, nunca cuestionamos el video, pero nos llamó la atención la furiosa reacción de numerosos usuarios de las redes contra quienes tuvieron la idea de subir ese contenido, convirtiendo la timeline del video en un tremendo muro de los insultos contra Diego Prieto. ¿Por qué no gustó en redes? Se lo dejamos de tarea a todos los responsables implicados… ¿Es un asunto menor? Sí, pero muy ilustrativo de cómo la cúpula de la dependencia que hoy maneja 8 mil millones de pesos de presupuesto flota en una burbuja de frivolidad, autoelogio y otros datos y se hacen los sordos ante numerosos cuestionamientos de su propia comunidad por falta de recursos, y ante críticas puntuales por la gestión del proyecto del Tren Maya y el museo Macay, por ejemplo. Hoy el INAH vive entre la frivolidad y la emergencia y aquí estaremos listos para consignarlo todo. Así que don Diego Prieto ya se ganó su calendario a final de año porque, como van las cosas, seguirá siendo uno de nuestros clientes frecuentes.
(Escríbanos a columnacrimenycastigo@gmail.com)