La Secretaría de Cultura es como los que llegan a las fiestas “de traje”, pero sin las chelas. Por el centenario del nacimiento del gran fotógrafo Héctor García se realizará una serie de exposiciones en distintos puntos de la ciudad, como las rejas de Chapultepec, el Museo Nacional de Arte y el Museo del Estanquillo. Eso está muy bien. Sin embargo, al mismo tiempo que se anuncian las celebraciones, también se hace del conocimiento público que la Fundación María y Héctor García, que resguarda el importante archivo del fotógrafo, no cuenta con recursos suficientes para proteger su contenido. Al respecto, Héctor García, hijo del fotógrafo, dijo a EL UNIVERSAL que ni la Secretaría de Cultura ni alguna otra institución han ofrecido apoyo y que, en realidad, fue él quien se acercó a las autoridades a pedir este merecido homenaje a su padre, uno de los fotógrafos de referencia del siglo XX. Al final, al menos lo apoyaron en esto, nomás faltaba. Esto nos deja pensando, ¿cuál es el verdadero interés de la Secretaría de Cultura por el patrimonio cultural mexicano más allá del discurso?
Incongruencia de la 4T
Pese a que ya son cuatro años del discurso de AMLO de hacer a un lado la herencia española y enaltecer las culturas originarias, esta misma administración se le ocurrió crear “Reinos de México” para promover lugares del país basados en culturas internacionales. El primer sitio en recibir esta “distinción” —y en ser el hazmerreír en redes sociales— fue el complejo residencial Val’Quirico, en Tlaxcala, que está inspirado en la Toscana, Italia. La noticia causó burlas en redes sociales, y señalaron el doble discurso de la 4T. (Escríbanos a columnacrimenycastigo@gmail.com)