La semana pasada publiqué en esta columna distintos actos de violencia homicida acontecidos durante el fin de semana antepasado en Chilpancingo y Acapulco y de cómo el crimen organizado había logrado (directa o indirectamente) afectar gravemente el servicio de transporte público en el afamado puerto.
¿Y qué ha pasado desde entonces?
LUNES 22: Hombres armados atacaron las instalaciones de la Asociación Ganadera en Iguala donde asesinaron a tres integrantes de una familia e hirieron a una mujer embarazada. Transportistas de Taxco suspendieron sus servicios luego del asesinato de uno de sus choferes en pleno centro de la ciudad. Taxistas y peseros se manifiestan hartos de ser acosados por La Familia Michoacana.
MARTES 23: Se suspenden las clases en Taxco ante la advertencia de que podrían desatarse nuevos hechos de violencia. Muchos comercios mantuvieron sus puertas cerradas. Los habitantes mencionan en redes sociales que las calles asemejan a un pueblo fantasma. En redes sociales circula un video de hombres armados golpeando con una tabla en la parte posterior de las piernas a un agente de tránsito municipal en Petatlán. En la grabación se observa al oficial suplicar que no lo golpeen y que de ahora en adelante él les reportará.
MIÉRCOLES 24: Un comandante y un agente de la policía ministerial de Guerrero desaparecieron en Pilcaya (municipio vecino de Taxco). La camioneta donde viajaban fue hallada abandonada. Por tercer día consecutivo, el servicio público de transporte en Taxco sigue sin operar, las clases no se han reanudado y múltiples comercios permanecen cerrados por decisión de sus dueños.
JUEVES 25: Los dos agentes de la Fiscalía de Guerrero privados de su libertad en Taxco, fueron encontrados ayer asesinados. El municipio lleva cuatro días en modalidad de pueblo fantasma. En el marco de las protestas para exigir al gobierno estatal la búsqueda de cuatro integrantes de una familia secuestrados, la policía comunitaria de Ayahualtempa presentó a 20 menores (niños y niñas de 12 a 17 años) como nuevos miembros de su fuerza para defender al pueblo de los embates criminales.
VIERNES 26: Taxco cumple seis días sin transporte público y sin clases presenciales. Sus habitantes prendieron veladoras pidiendo paz y seguridad. El alcalde describe los hechos de violencia como “bachecitos”. Después de más de dos años, el secretario de Seguridad Pública Estatal (un capitán de la Marina) fue relevado por un General de brigada del Ejército. En tan solo cinco días, 12 personas han sido asesinadas en Guerrero acorde a registros oficiales.
SÁBADO 27: Hombres armados ejecutaron a un conductor en la colonia Campestre en Iguala. También en Iguala, agresores armados incendiaron una camioneta Urvan en una base de transporte público y en la comunidad de Coacoyulillo (a 80 kilómetros de Chilpancingo), otro grupo de agresores incendiaron tres casas y cinco vehículos.
Sigo sin entender por qué los distintos órdenes de gobierno creen que un militar es la mejor opción para un puesto que debería ser civil y para un policía de carrera, pero sin lugar a duda, la llegada de un nuevo secretario de Seguridad Pública era inevitable, aunque solo sea un movimiento de ajedrez político para taparle el ojo al macho.
Así es que no me queda más que decir: Buena suerte Sr. General de brigada, la va a necesitar.
POSTDATA. Los asesinatos de políticos hacia el proceso electoral de 2024 se están empezando a convertir en parte de escenario nacional:
- Ricardo Teja (Morena) 21 de diciembre. Buscaba la Alcaldía de Acapulco, Guerrero.
- Alfredo Lezama (PAN) 4 de enero. Buscaba una diputación local en Morelos.
- David González (PRI-PAN-PRD) 5 de enero. Buscaba la presidencia municipal de
Suchiate, Chiapas.
- Sergio Hueso (MC) 5 de enero. Buscaba la presidencia municipal de Armería, Colima.
- Miriam Ríos (MC) 11 de enero. Era comisionada municipal en Zamora, Michoacán.
- Samantha Gomes (Morena) 14 de enero. Buscaba un escaño al Senado.
- Marcelino Ruiz (PRD) 24 de enero. Buscaba la Alcaldía de Atlixtac, Guerrero. Su esposa
también fue ejecutada.
- José Naredo (PRD) 27 de enero. Era dirigente del partido en Cuitláhuac, Veracruz.
El pasado proceso electoral del 2021 dejó 102 políticos asesinados. Todo apunta a que esa cifra será rebasada en esta elección del 2024.
Consultor en seguridad y manejo de crisis
@CarlosSeoaneN
