Sentados en la mesa de la alianza opositora, y con el peso de la sospecha de traición en los hombros, el PRI empezó lanzándose contra los empresarios. El mensaje tenía dos destinatarios inmediatos, presentes en la reunión: Claudio X . González y Gustavo de Hoyos , figuras de la sociedad civil que orquestaron la conformación del bloque para la elección de junio pasado.
Según me revelaron asistentes al encuentro, Alejandro “Alito” Moreno, dirigente nacional, y Rubén Moreira , coordinador de este partido en la Cámara de Diputados, lanzaron un dardo contra los hombres de negocios: se quejaron de que los empresarios son los más afectados por la contrarreforma eléctrica del presidente López Obrador, sin embargo, no están dando la pelea ni el debate. Que el empresariado mexicano salió muy aguerrido para quejarse de López Obrador … en secreto. Se quejan de que la oposición no existe, pero exigen que esa oposición sea crítica frontal del primer mandatario, que queme sus naves, que las bancadas en el Congreso se vuelvan diques ante los desplantes autoritarios y retrógradas de López Obrador, que las instituciones actúen como fieros contrapesos… pero cuando les toca a los empresarios poner pecho a las balas, buscan un arreglo en lo oscurito con algún interlocutor de primer nivel en el gobierno, se hacen invitar a Palacio Nacional y sonríen para la foto con el presidente. Las figuras de PAN y PRD ahí presentes no tuvieron más que aceptar la validez del argumento tricolor. Es algo que en sus propias discusiones internas ha surgido.
Este señalamiento contra los empresarios fue la respuesta de la cúpula priista ante la exigencia de una toma de postura concreta: la mesa fue convocada ante la sensación pública de que el PRI traicionaría la alianza opositora y votaría del lado de Morena la contrarreforma eléctrica. La respuesta-promesa del PRI, según las mismas fuentes, fue que dejarían correr los foros de debate que han convocado sobre el tema, y al final votarán del lado de la oposición. Garantizó tener el control de la bancada en la Cámara de Diputados y por tanto, de los votos.
Sin embargo, la manera en que “ Alito ” Moreno fraseó su postura, me dicen, no dejó completamente tranquilos a sus interlocutores del PAN, el PRD y la sociedad civil: le dieron tantas vueltas a la explicación de su postura que dejaron ventanas abiertas a la ambigüedad y el cambio de señales. El tiempo dirá.
SACIAMORBOS
Incluso los más férreos opositores a “Alito” dentro del PRI admiten que el campechano tiene total control del partido y de su bancada en San Lázaro . Figuras que han ocupado puestos de los más altos niveles en el partido y el gobierno admiten que por más que quieren hacerle frente, no le ganan porque la mayoría de los diputados tricolores se la deben a él, y ha logrado dominar los órganos directivos del partido colocando a su gente en las posiciones clave y teniendo mayoría de leales en las votaciones internas.