Ya es oficial, el próximo 10 de diciembre, el libertario Javier Milei se convertirá en el presidente de Argentina para el periodo 2023-2027. Una amplia mayoría de argentinos optó por negarle otro período de gobierno al kirchnerismo y prefirió elegir a este personaje controversial, que con frecuencia habla en tono agresivo y plantea propuestas radicales.
En realidad, ¿Qué podemos esperar del futuro gobierno de Milei? Un primer indicio, que nos sirve de brújula, es el discurso que dio este domingo como ganador de la elección presidencial. En dicho mensaje, “el loco”, como lo apodan desde la infancia, se presentó un poco más moderado que durante la campaña. Milei no hizo el griterío habitual, ni profundizó en la idea de dolarizar la economía, acabar con el banco central o romper relaciones con países como Brasil y China, a los cuales él tilda de “comunistas”.
Es revelador que durante su mensaje, el hoy presidente electo, mencionó a su hermana, Karina Milei, quien dirigió su campaña política, y a Santiago Caputo, a quien el futuro inquilino de la Casa Rosada calificó como el “verdadero arquitecto” de su victoria. El nombre de Caputo, socio de una empresa de marketing político, no había hasta ahora aparecido en los discursos públicos de Milei, y la prensa argentina, de manera general, parecía ignorar su preponderancia como consultor político de la campaña. Pero si el presidente electo decidió mencionarlo no fue solo para agradecerle, sino también para enviar un mensaje claro. ¿Quién es Santiago Caputo? Se trata de un consultor que se acercó a Milei en su campaña para diputado federal en 2021, pero cuyos vínculos familiares son relevantes. Es el hijo del ex presidente del Colegio de Notarios de Buenos Aires, Claudio Caputo, quien tiene dos hermanos: Nicolás Caputo, un empresario que Macri describe como un “amigo del alma”, y Luis Caputo, ministro de finanzas en el gobierno de Macri. En pocas palabras, el asesor al cual Milei atribuye su triunfo tiene los afectos de Macri, quien si bien fue un presidente sumamente impopular, goza de la confianza de la elite financiera argentina. Lo cual sugiere que Milei pretende evitar turbulencias financieras que pudieran generarse debido a sus descabelladas propuestas para el país.
En su mensaje, Milei agradeció al expresidente Macri y la ex candidata del macrismo, Patricia Bulrich. El presidente electo parece tener muy claro que para gobernar necesitará el apoyo político del macrismo, pues si bien él ganó ampliamente la elección presidencial, su partido, “La Libertad Avanza”, no logró obtener ningún gobierno regional y en términos legislativos tiene una muy pequeña minoría, con solo 7 senadores de 72 y 35 diputados de 257. Pero ojo, esto no significa que Milei vaya a abandonar su discurso estridente y sus postulados más radicales, de hecho en el mismo mensaje, el futuro presidente señaló que su país necesita pasar por cambios drásticos. Parece más bien, que este controversial personaje mantendrá dos discursos, uno más controvertido para mantener el apoyo ciudadano y otro más pragmático para gobernar.
El triunfo de Milei no implica la muerte del peronismo, de hecho, si bien el peronismo perdió la elección presidencial, continúa siendo muy fuerte en el Congreso, incluso tiene más curules que la alianza política de Macri; además, mantiene una enorme fuerza entre los sindicatos. No cabe duda de que Milei buscará hacer lo que Macri no fue capaz de hacer: dejar al peronismo completamente por los suelos, pero la pregunta es ¿cómo va a intentar Milei desaparecer al peronismo de la vida política argentina sin acabar también con las políticas sociales?, porque si intenta hacer eso podría perder mucho apoyo de su base electoral: el argentino de menores recursos.
Tampoco parece que Argentina vaya a romper relaciones diplomáticas con países como Brasil y China, como había asegurado en la campaña Milei. Hoy, Buenos Aires no está en condiciones de romper relaciones con nadie, pues se encuentra en una crisis muy aguda y requiere toda la ayuda que pueda conseguir de otros países, incluida China. De hecho, Argentina le debe más dinero a China que al Fondo Monetario Internacional, con una visión realista, Milei no está en posición de cerrar la puerta a otros países.
No es fácil dolarizar un país como Argentina que no tiene reservas internacionales, vamos, un país que no tiene dólares. Esa propuesta y la de la destrucción del Banco Central, que fueron muy útiles durante la campaña para mostrar cuán diferente era su propuesta respecto a la de su adversario Sergio Massa, ministro de economía del actual gobierno, no necesariamente verán la luz. La evidente alianza entre Milei y Macri parece sugerir que ese no será el camino que tomará el próximo gobierno de Argentina.
Como reza el dicho popular “del dicho al hecho hay mucho trecho”, el verdadero rostro de Milei como presidente aún está por verse.
@B_Estefan