La cooperación bilateral entre México y Rusia la podemos dividir en tres sectores principales: el económico, el político, y el cultural y educativo. Los dos primeros ya están bien mencionados y demostrados por medios de prensa tanto hispanohablante,como por los periódicos rusos. Pero si hablamos del último todavía no está bien platicado este tema y especialmente el componente educativo.
Uno puede preguntar: ¿qué puede ofrecer Rusia a un mexicano en este sentido?.
Cada año, 32 mexicanos becados por el gobierno ruso salen del país para estudiar a las regiones de Rusia y recibir allá educación superior gratis. Las mejores universidades de Moscú y San-Petersburgo abren sus puertas a los estudiantes que desean titularse de una de más de cien carreras ofrecidas por la Federación Rusa. Desde ingeniería aeroespacial hasta historia del arte. Una buena oportunidad, ¿de verdad? La página web education-in-russia.com, donde se puede encontrar toda la información sobre el proceso de postulación para la beca, en 2021 recibió más de 300 solicitudes por parte de mexicanos.
Todos sabemos que un estudiante al elegir un país para graduarse toma en cuenta no solo el costo de vida en cierto estado, sino también el ranking internacional de la universidad y las normas que rigen las oportunidades de empleo para estudiantes.
Rusia puede resultar bien atractiva en muchos de estos aspectos. En primer lugar, cabe mencionar que Rusia entró en el TOP-10 en el ranking de los países más atractivos para los estudiantes extranjeros, compartiendo el cuarto-sexto lugar con Alemania y Francia. Los estudiantes de educación superior en Rusia muy a menudo ganan concursos internacionales en ciencias ciertas como matemáticas, físicas y electrónicas. Eso es un verdadero reflejo de la calidad de enseñanza en estas instituciones y de los altos estándares que se promueven allá. Más de 750 establecimientos de educación superior en 82 regiones de Rusia dan conocimientos fundamentales en una amplia gama de materias. Según las estadísticas, las siguientes áreas en las universidades rusas son las más populares entre los estudiantes mexicanos: física, programas aeroespaciales, programación y tecnología de la información, economía y estudios de posgraduados para médicos internos.
¿Pero si uno no gana la beca? ¿Tiene que pagar una millonada como en Estados Unidos? Las tasas de matrícula en las universidades rusas son mucho más baratas que en los EE. UU., Canadá y Gran Bretaña, y el nivel de formación está a la misma altura de las principales universidades del mundo.
¿Y si no sé nada de ruso? Esto no es un problema. Al ser becado por el gobierno o al ingresar por su propia cuenta a la universidad rusa hay la oportunidad de pasar un curso intensivo de un año para conocer el idioma y poder hablar, escribir y estudiar sin barrera de lenguaje.
Las universidades rusas están extremadamente interesadas tanto en la matriculación de estudiantes mexicanos como en la cooperación académica con las universidades nacionales del país. Por el momento, alrededor de 30 universidades rusas han celebrado acuerdos de cooperación con socios mexicanos, incluidas universidades líderes como Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, Instituto Politécnico Nacional, Universidad de Guadalajara, Universidad Autónoma de Nuevo León.
En la agenda está un aumento en el número de acuerdos de asociación y el desarrollo de un sistema de intercambios académicos entre los dos estados. Se presta especial atención al desarrollo de programas educativos adaptados teniendo en cuenta los requisitos de la Secretaría de Educación Pública de México.
Por supuesto, la pandemia Covid-19 ha hecho ajustes a estos planes. Hemos sido testigos de la mayor disrupción en los sistemas educativos de la historia, que afectó a casi 1,600 millones de estudiantes en más de 190 países y en todos los continentes. Por otro lado, la crisis sirvió de estímulo para la innovación en educación. Se están adoptando enfoques innovadores para garantizar la continuidad de la educación y la formación. Los cursos de idioma ruso para las facultades preparatorias y las clases universitarias estaban disponibles en línea para todos los estudiantes que, debido a restricciones sanitarias y epidemiológicas, no habían podido salir de México.
Al mismo tiempo, mucho antes de la pandemia, el mundo de la educación en línea comenzó a desarrollarse rápidamente y Rusia se unió a esta carrera. Desde principios del siglo XXI los cursos masivos abiertos en línea (MOOC se han convertido en una nueva noción en el sistema educativo internacional. Es una herramienta eficaz para promover las universidades y popularizar la cultura del país. Las universidades rusas no solo promueven activamente sus proyectos educativos en plataformas en línea extranjeras populares, como Coursera y Sololearn, donde la educación está disponible en ruso y otros idiomas extranjeros, sino que también participan en el desarrollo de MOOC nacionales. Cursos de programación y matemáticas superiores, programas de filosofía y lingüística, cursos de pasatiempos, seminarios webs profesionales, disciplinas universitarias válidas están disponibles para los usuarios de plataformas rusas Stepik, Universarium, Netology.
Otro punto importante que da mucho impulso al proceso fortalecimiento más profundo de diplomacia pública es los viajes educativos a Rusia que se realizan para conocer el país y quizás romper los prejuicios que uno puede tener sobre el clima, la gente y la situación socioeconómica.
Uno de los programas organizados por el Gobierno de Rusia es “la Nueva generación”. Es una reunión en una de las ciudades rusas de jóvenes especialistas en su esfera como politólogos, periodistas, científicos para conocer mejor uno a otro y algo nuevo de los expertos rusos. Este programa también prevé talleres para los participantes donde pueden intercambiar opiniones y recibir nuevos conocimientos. Fomenta tanto el networking como nuevos proyectos internacionales entre los jóvenes que apoyan al desarrollo internacional.
Cabe mencionar que los lazos entre nuestros países también se estrechan por el creciente de número de miembros de la diáspora rusa que residen en México. Ya aparecen nuevas generaciones de niños ruso-mexicanos que nunca han visitado Rusia y no conocen su segunda patria. Para este tipo de personas se organiza un programa especial “¡Bienvenido a Rusia!” con la meta de ofrecerles la oportunidad de conocer mejor la cultura de su segundo país natal. Este año 2 niños mexicanos salieron para una estancia corta a Moscú para disfrutar de los museos y sitios culturales y conocer a Rusia mejor. Su programa de visita es superamplio: se les ofrece visitar desde los teatros más conocidos del país hasta las universidades más prestigiosas. Esperemos que en el futuro puedan servir como un puente de diplomacia pública entre México y Rusia para el fortalecimiento de nuestras relaciones bilaterales y fomentar el interés a la cultura rusa aquí y a la mexicana en Rusia.
Concluyendo solo quería decir que el intercambio educativo y cultural es la clave para la fructífera y eficiente cooperación entre nuestros países. A pesar de tanta distancia geográfica que tenemos, nuestras naciones siempre sienten una cierta atracción una a otra.
Representante de Rossotrudnichestvo en México.