Dos noticias recibió el Atlante esta semana. La primera fue buena, ya que junto con la Universidad de Guadalajara, recibió la certificación, lo que significa que cumple con los requisitos para poder formar parte de la Liga MX. La mala es que para que se abran las puertas del ascenso deportivo, el reglamento marca que cuatro clubes del Ascenso MX deben de tener esta certificación, y eso está lejos de concretarse. Así que si el Potro quiere pertenecer a la élite, lo que desde hace tiempo merece por méritos en la cancha, deberá hacerlo por compra de franquicia o invitación.