Además de cumplir con las labores de un auxiliar, Rafael Márquez tiene una encomienda importante en el cuerpo técnico de la Selección Mexicana: es el encargado de suavizar la relación de algunos jugadores con el Tricolor.
Es bien sabido que gente como Hirving Lozano y Guillermo Ochoa no acabó en buenos términos, por lo que el exdefensa intercederá para que vuelvan.
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