Durante la negociación que llevó a Jesús Orozco Chiquete al Cruz Azul, la directiva de La Máquina no estaba tan convencida de pagar 11 millones de dólares por los derechos federativos del defensa central surgido en el Guadalajara, así es que ofreció cerrar la operación con una cantidad menor y un jugador: Erik Lira.
El problema es que a las Chivas no les agradaba el trato, por lo que sugirieron que podría llevarse a cabo si los celestes ponían en el paquete a Luis Romo, pero eso no gustó a los Cementeros, que terminaron por desembolsar la cantidad completa.