Este fin de semana continuaron los intentos de políticos de todos los colores por detener el paro nacional de mujeres, convocado originalmente por grupos feministas. Estas estrategias se dividen en dos categorías: 1. Los que se “suman” a la causa: dirigentes de partido, senadoras e incluso diputadas de oposición que se asumen como convocantes y contaminan el espíritu de la protesta. No entienden que el movimiento también es contra ellos (y ellas), porque es contra el Estado, del cual son parte. Otros, encima, se han atrevido a decir, desde sus posiciones de poder, que “autorizan” a las mujeres a faltar a sus trabajos, como si ellas necesitaran permiso. 2. Los que acusan a las mujeres de derechistas: funcionarios y funcionarias del gobierno están difundiendo noticias falsas –respaldados por mezquinos opinadores y portales web de noticias patito— que intentan convencer a la gente de que el paro está patrocinado por líderes de oposición; algunas mujeres emblema de la lucha de género, como Lydia Cacho, han denunciado oportunamente estas fake news. Izquierda y derecha, por distintos motivos, están unidas en el intento de destruir esta iniciativa, ¿lo conseguirán?

Comisión contra feminicidios, ¿apartidista?

La violencia contra las mujeres y uno de sus muchos extremos, el feminicidio, que reprueban las sociedades en México y el mundo, entró de última hora, como un pasajero inesperado, en la agenda del Senado. Nos comentan que la propuesta de integrar una Comisión Especial para dar Seguimiento a los casos de Feminicidios ya fue aprobada. Se espera, nos dicen, que quienes la integrarán tendrán que demostrar que tras problemas como éste no hay derechas, ni izquierdas, ni partidos políticos; hay madres, hermanas, esposas, hijas, con sus vidas en peligro latente. Veremos si los senadores están a la altura de las expectativas, y no caen en el juego fácil de limitarse a lanzar lodo. La senadora Josefina Vázquez Mota, promotora de la comisión, tendrá que ser la primera en garantizarlo.

Outsourcing en el Senado

En el Senado, que se propone reglamentar la subcontratación, desde hace años tiene entre su personal a trabajadores de limpieza y agentes de resguardo, quienes laboran para empresas outsourcing. En ese contexto, el senador Martí Batres, de Morena, ha propuesto que la Cámara Alta los contrate sin intermediarios, y en este empeño, nos indican, tiene el respaldo de 23 senadores de su bancada y del PAN y MC. Algunos, creen que sería una acción de justicia y que negarla carece de justificación; sin embargo, otros nos señalan que detrás de la propuesta hay una manzana envenenada… pues los trabajadores sindicalizados de la administración pública no son precisamente paladines de la eficiencia y el trabajo justo.

Farmacéuticas siguen en busca de acercamiento

Nos cuentan que la industria farmacéutica nacional no quita el dedo del renglón e intenta construir puentes de colaboración con el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. Nos dicen que están dispuestos a colaborar con la 4T para erradicar la corrupción y fortalecer a la Cofepris como agencia reguladora. Aseguran que el país tiene la capacidad de producir lo requerido por la población y que si hay empresas que se deba castigar o inhabilitar, que lo haga, pero no meta a todas en el mismo costal. A todos beneficiaría, pues, que la lucha contra la corrupción se traduzca en castigos… no en desabasto.

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