Nada tiene de malo que dos profesionales de la política departan en una comida. Sin embargo, si esos dos profesionales eligen para ese encuentro un lugar público en momentos en que el timing favorece a sus adversarios, podría ser leído como un error político, o como una señal, como la intención de mandar un mensaje. Es el caso de que ayer el expresidente Felipe Calderón y el presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, decidieron compartir las pastas y los cortes de carne en un concurrido restaurante del sur de la ciudad. Don Felipe es quizá hoy por hoy el principal opositor real a muchas de las políticas del presidente Andrés Manuel López Obrador, pues su voz es más escuchada que la de cualquiera de los presidentes de los partidos opositores, y el propio AMLO le ha dedicado mucho tiempo de críticas. Don Lorenzo, un árbitro electoral contra el que la 4T ha emprendido una ofensiva que va desde debilitar financieramente al INE, hasta buscar su cabeza y sacarlo de la presidencia de manera adelantada. Así que se podrá imaginar que la plática en la mesa no fue sobre comida Italo-Argentina, ni de buenos vinos, quizá hubo otro temita de conversación entre ambos políticos. La pregunta es: ¿Descuido o mensaje?
El invitado de AMLO
El presidente Andrés Manuel López Obrador invitó al expresidente de Uruguay José Mujica, para que esté presente en el acto conmemorativo del 1 de diciembre próximo y el uruguayo aceptó, aprovechando que tendrá agenda en la Ciudad de México por lo menos hasta el 4 de diciembre próximo. Mujica estará en el Zócalo capitalino en calidad de invitado especial. Algunos se preguntan si para esa celebración también recibirá una invitación el expresidente boliviano Evo Morales, quien como usted recordará salió a toda prisa de Bolivia tras renunciar al cargo y, por ahora, vive como asilado en México, y ha sido recibido con bombo y platillos por funcionarios de la 4T, miembros del gabinete y hasta po r la presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, quien lo considera el presidente legítimo de Bolivia.
Ofrece amor la 4T
En el Senado, nos dicen, los enfados con la bancada de Morena y con el Poder Ejecutivo ya son irresistibles desde las peleas que hubo por la entronización a chaleco de Rosario Piedra Ibarra, en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. Nos aseguran que los coordinadores, quienes ya tienen la piel curtida y no se ofenden fácilmente, resolvieron volver a la armonía. Sin embargo, a sus huestes aún no se les baja el enojo, no les llega el espíritu navideño y siguen sin entender la tonada. Es el caso, nos hacen ver, del panista Julen Rementería, quien no supo leer los mensajes de amor que durante una reunión en comisiones le hacía llegar, zalamero, el senador morenista Félix Salgado Macedonio.
Estira y afloja por el salario mínimo
Este viernes, la Comisión Nacional de Salarios Mínimos tendrá una sesión en la que se discutirá el aumento al salario mínimo. Nos comentan que aunque aún no se define el monto del incremento, la iniciativa privada, encabezada por la Confederación Patronal de la República Mexicana, ha propuesto elevarlo a 127.76 pesos, mientras que el senador morenista con licencia Pedro Haces, quien también es líder de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), ha pugnado por que aumente, al menos, a 132 pesos. Para este año el salario mínimo se incrementó 16% al fijarse en 102.68 pesos y para la frontera norte en 176.72 pesos. Pronto se verá quién ganó la partida para 2020.
***En la imagen Felipe Calderón. Foto: Reuters