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Vaya vapuleada que se llevó ayer el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación Luis María Aguilar al presentar un proyecto en el que buscaba favorecer al excandidato presidencial del PAN Ricardo Anaya, en un litigio contra EL UNIVERSAL. La mayoría de las ministras y los ministros tuvieron destacadas intervenciones en defensa de la libertad de expresión, en algunos casos rayaron en la brillantez y casi todos se pronunciaron en contra del proyecto de Aguilar. Así, una vez que los 10 ministros que actualmente integran el pleno de la Corte (luego de la renuncia de Eduardo Medina Mora) habían expuesto sus argumentos y que estaban listos para votar, y seguramente derrotar por paliza el proyecto de Aguilar, el propio ministro ponente solicitó que se le permitiera hacer ajustes a su proyecto para recoger algunas de las posturas emitidas por sus colegas y que nuevamente, quizá el próximo año, se agende para una nueva discusión y votación. Luis María Aguilar no dijo si cambiará o no el sentido de su proyecto, sin embargo, nos aseguran que contempla mantenerlo a favor del panista, pese a que la mayoría de los ministros no apoyaban su resolución. En la Primera Sala presentó un proyecto a favor de Anaya y no se lo aprobaron, ayer presentó otro y tampoco, ahora va por un tercero. ¿De qué tamaño será el compromiso inconfesable del ministro Aguilar?
Un nuevo pleito entre el PAN y Monreal
Los panistas y los morenistas se llevan cada día más pesado en el Senado y están escalando su pleito con los integrantes de la Junta de Coordinación Política. Ahora, nos explican, los azules se quejaron de la conducta de a quien llaman “empleado” contratado por el senador Ricardo Monreal, el secretario técnico de la junta, José Manuel del Río Virgen, quien en una entrevista de televisión acusó a la senadora azul Xóchitl Gálvez de conducirse “vulgarmente”. El coordinador parlamentario del PAN, Mauricio Kuri, argumentó en una carta enviada a los miembros de la junta que sin respeto, profesionalismo y honradez “no se pueden alcanzar los acuerdos necesarios” en la Cámara de Senadores. Y, para rematar, el legislador exigió a don Ricardo que el caso del “empleado” sea atendido por la Contraloría Interna y el Comité de Ética del Senado, para que se tomen las medidas y sanciones pertinentes. Así se llevan azules y morenistas…
La olla exprés del Presupuesto
“¡Yo no soy gato de nadie!”. “En mi chingada vida ni a los Presidentes de la República les he esperado tanto tiempo y menos a una comisión de diputados”, así contestó el líder de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas, Álvaro López Ríos, al coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Mario Delgado. Nos dicen que López Ríos fue citado a las 13:00 horas por los coordinadores en el hotel que está funcionando como sede alterna a la Cámara de Diputados para tratar de negociar su liberación. Sin embargo, dejaron esperando más de una hora, por lo que se levantó de la mesa sin un acuerdo para liberar San Lázaro. En la próxima sesión para aprobar el Presupuesto podría haber golpes y sombrerazos, a ver cómo reciben los campesinos a los legisladores después de que el pasado miércoles a golpes, insultos y jalones corretearon a los coordinadores parlamentarios. La olla exprés está a punto de estallar y nadie baja la flama.
Un pastel de cannabis para la Cofepris
Hasta la sede la Comisión Nacional para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris), que encabeza José Alonso Novelo Baeza, debió llegar ayer un enorme pastel con 29 velitas —una por cada mes transcurrido— para recordar que el 19 de junio de 2017 se publicaron las modificaciones a la Ley General de Salud que legalizaron la cannabis medicinal y que desde ese día la regulación correspondiente quedó en manos de esa agencia sanitaria, que aún sigue sin emitir un reglamento. Vale la pena recordar que el 14 de agosto de 2019 la Suprema Corte emitió una sentencia en la que fijó un plazo de 180 días a la Secretaría de Salud para emitir el reglamento que garantice los derechos de los pacientes. Y ya van más de 850 días y nada. Sin embargo, los industriales de la cannabis nos hacen ver que quienes no han perdido el tiempo son aquellos que en el mercado negro ofrecen productos con supuestas cualidades curativas que ponen en riesgo a los pacientes frente a la falta de información y regulación. ¿Cuántas velas más sumará el pastel?