Más allá de la visión compartida que dicen tener los gobiernos de Joe Biden y Andrés Manuel López Obrador en temas como migración, seguridad y desarrollo, nos dicen que en la relación bilateral se empieza a notar la cercanía personal que han desarrollado funcionarios de ambos países. Ayer, el canciller Marcelo Ebrard contó que habla varias veces a la semana con Alejandro Mayorkas y los domingos con Antony Blinken. En el diálogo privado, los dos jefes de la diplomacia intercambiaron elogios. La buena “química” entre los personajes se traduce, nos comentan, en asuntos concretos: ayer, por ejemplo, durante la recepción del encuentro bilateral, el canciller llevó a Alejandro Celorio, consultor jurídico de la SRE, con el fiscal Merrick Garland para que le explicara la demanda que presentó México contra fabricantes de armas en Estados Unidos.

AMLO y las bellezas del Palacio

Muy conmovido, nos cuentan, quedó el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken con el tour que el presidente Andrés Manuel López Obrador le dio a la delegación estadounidense por Palacio Nacional para mostrar los murales que adornan el recinto. El presidente mexicano se ha convertido en un buen guía de turistas para sus visitantes nacionales y extranjeros cuando los invita dentro de Palacio Nacional. La parte favorita de los asistentes, nos dicen, a la hora de hacer los recorridos, es la visita a los murales de Diego Rivera. Por supuesto, el mandatario no pierde oportunidad para aprovechar la belleza del lugar para echar flores a su propio gobierno, pues la plática con sus invitados siempre deriva, con el tiempo, sobre lo que él considera las 4 transformaciones del país. Cree que la suya, desde luego, es una de ellas.

Funcionario celebra inundación

El secretario de la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu), Roman Meyer Falcón, busca estrellita en la frente en tiempos en que el presidente López Obrador quiere hacer pasar su reforma eléctrica en el Congreso. Es por eso que se lanzó a promover otra polémica decisión del gobierno: cancelar el Nuevo Aeropuerto de la CDMX en Texcoco. Ayer difundió una imagen de los terrenos del complejo aeroportuario cancelado completamente inundados, con la frase “Cuando la naturaleza retoma su lugar”. Una curiosa elección de palabras, nos dicen, considerando que miles de personas en el lecho del que fuera el antiguo gran lago de Texcoco han padecido este año terribles inundaciones y daños a su patrimonio que, hasta el día de hoy, el gobierno no les ha podido resarcir. Mejor sería que no invoque a la naturaleza el funcionario, pues si se trata de “darle su lugar”, todo el Valle de México tendría que estar también bajo el agua.

Laura Bozzo quería más negocios

Nos comentan que Laura Bozzo, la comentarista peruana que está siendo buscada por la Interpol por olvidar que no podía vender un inmueble que había sido embargado por el SAT, al parecer también olvidó otra cosa en nuestro país. Nos detallan que en el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) estuvieron desempolvando expedientes y se encontraron que en 2011 la llamada “abogada de los pobres” solicitó el registro de su nombre como marca para vender zapatos y servicios de entretenimiento. Sin embargo, debido a que la ahora prófuga no concluyó los trámites siguientes, el instituto la consideró como “solicitud abandonada”. La señora Bozzo quería extender su presencia más allá de la tele.