Nos dicen que, al interior de San Lázaro, el presidente de la Cámara, Santiago Creel, tiene a un grupo de expertos trabajando para identificar las inconstitucionalidades del llamado Plan B del presidente Andrés Manuel López Obrador, que ayer fue avalado por el Senado. La idea, nos dicen, es que apenas regrese a la Cámara de Diputados y se avale por la mayoría de Morena y aliados, pueda interponerse una acción de inconstitucionalidad lo más justificada y sustentada posible ante la Suprema Corte de Justicia con la intención de poder frenar estas reformas. Nos hacen ver que esta estrategia conlleva sus riesgos, pues si por hacerlo con prisa las modificaciones no se analizan a conciencia para presentar argumentos legales sólidos, el intento de frenar el Plan B en la Corte podría fallar.
Xóchitl Gálvez, un machucón a los aliados
En el Senado, en medio del debate del llamado Plan B de Reforma Electoral del presidente López Obrador, ayer la senadora panista Xóchitl Gálvez se presentó vestida con una botarga de un dinosaurio verde y un cartel con la leyenda “Jurassic Plan”. “Ya les dije cómo hay que hacer una elección tramposa. Ya les dije cómo lo hacía el PRI de la antigüedad, cómo lo hacía Manuel Bartlett”, dijo Gálvez en su papel de dinosaurio. La puntada de la senadora generó risas en algunos de sus compañeros, pero nos hacen ver que para algunos priistas la broma no fue de buen gusto, en especial cuando se trata de mantenerse firmes y cercanos como un bloque opositor de contención. No era necesario que mentara al PRI, y al menos hubiera traído un dinosaurio del color guinda, opinaron algunos. De que la senadora es brava hasta a los aliados critica.
Más tensión entre el gobierno de México y Perú
Nos comentan que la tensión de las relaciones entre México y Perú se suma un nuevo problema. Se trata de los más de 250 connacionales que no han podido salir del país debido a bloqueos carreteros y cierre de aeropuertos por las protestas tras la detención de Pedro Castillo, a quien el gobierno mexicano aún considera presidente legítimo. Nos hacen ver que la situación puede subir de tono si la estadía de los mexicanos en el país sudamericano se prolonga por falta de condiciones de seguridad para que puedan viajar de regreso a México.
¿No hay nadie responsable por el Guacamaya Leaks en la Sedena?
A casi tres meses del hackeo al Ejército, nos comentan que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) sigue sin procesar a su personal de informática y de la dirección de archivo por la fuga de información que llegó a manos del grupo de activistas denominado “Guacamaya”. Nos aseguran que la dependencia nada más acondicionó espacios en la prisión militar del Campo Militar 1-A, donde están presos los militares del caso Ayotzinapa y de la guerra contra el narcotráfico, pero ningún militar ha caído por el caso que le costó la pérdida de millones de documentos clasificados al Ejército mexicano. ¿Será que nadie en la Sedena incurrió en responsabilidad?
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