En víspera del inicio del último periodo ordinario de esta legislatura, no comentan que el PRI recuperó su lugar como tercera fuerza, luego de que el año pasado tuvo una desbandada que encabezaron Miguel Ángel Osorio, Eruviel Ávila y Claudia Ruiz Massieu.
Eso fue aprovechado por Movimiento Ciudadano, que, con incorporaciones de carambola, como la de Laura Ballesteros, suplente de Xóchitl Gálvez, había superado en número a la bancada priista.
El colmillo y el pragmatismo del PRI afloraron, y lograron que su grupo parlamentario se recuperara, sumando a perfiles femeninos como Nancy de la Sierra o Nadia Navarro, así como Claudia Balderas.
Así, “haiga sido como haiga sido”, la fracción parlamentaria del PRI contará en este último tramo de la Legislatura con 14 senadores, por 12 de Movimiento Ciudadano, lo que le da derecho a exigir una vicepresidencia en la Mesa Directiva de la Cámara Alta y regresar, de panzazo al lugar de tercera fuerza política por debajo de Morena y el PAN.
grg