Algo inusual podría pasar este domingo en punto de las 22:00 horas en la radio mexicana: si los radiodifusores deciden suspender la transmisión de la Hora Nacional por temor a ser sancionados por las autoridades electorales luego de la demanda que presentaron los panistas: Luis Mendoza y Federico Döring por presuntamente haber favorecido en tres emisiones a Claudia Sheinbaum, ahora candidata presidencial de Morena, PT y Verde.
Nos recuerdan que la Hora Nacional lleva al aire, de acuerdo con datos del propio gobierno, 86 años y es producida por la Secretaría de Gobernación, a través de la Dirección General de Radio, Televisión y Cinematografía (RTC).
Es el programa gubernamental más antiguo del mundo, y se escucha en más de mil 700 radiodifusoras en cadena nacional. Y, por primera vez, el año pasado se pudo mirar a través de los canales de la Red de Radiodifusoras y Televisoras Educativas y Culturales de México A. C., así como las redes sociales Facebook y YouTube.
Fue en 1937, cuando, por iniciativa del general Lázaro Cárdenas, se creó La Hora Nacional fueron 93 las estaciones que enlazaron su señal por primera vez para transmitir la hora nacional.
Pero hoy con la controversia que se generó, la Cámara de la Industria de Radio y Televisión recomendó, debido a que no es una obligación, considerar la transmisión de este segmento oficial a través de sus concesionarios para evitar sanciones.
Pero nos adelantan, que será el INE quien determine el futuro de la Hora Nacional, y resuelva si es procedente la queja y emite medidas cautelares y podría determinar “bajar” algunos fragmentos de los programas demandados o también podría decidir que no hay ninguna violación, lo que es un hecho es que la CIRT dejó claro este programa gubernamental transmite por usos y costumbres de hace décadas, pero que no es una obligación para los radiodifusores.