Ante la inminente pérdida de su registro, por no lograr el 3% de la votación en las pasadas elecciones federales, el Instituto Nacional Electoral (INE) prepara los funerales del PRD, la desaparición del partido.
Pero nos dicen que los liderazgos perredistas se están alistando para dos escenarios posibles:
El primero, recuperar el registro de partido nacional y, con ello, iniciar un proceso de refundación del sol azteca, incluido el cambio de nombre.
El segundo, en caso de que no logren mantener el registro como partido nacional, preparar toda la documentación para presentar al INE y poder llevar a cabo las 20 asambleas estatales con 3 mil personas que pide la ley para lograr la aspiración de Asociación Política Nacional, con el apoyo de diversos sectores sociales y grupos que se han visto desfavorecidos por las políticas de la 4T.
En el terreno político, nos adelantan que la narrativa de este nuevo partido evitará la confrontación con el gobierno de Morena.
Nos explican que esa será la diferencia más importante que tendrá este partido con otras agrupaciones que también quieren ser partido, pero atacando de manera frontal a la 4T. "Seremos progresistas", nos explican algunos dirigentes amarillos.
grg