Por Renata De Miguel Orozco
La Ciudad de Acapulco, es el municipio más poblado de Guerrero con casi 780 mil habitantes (INEGI, 2020). A pesar de ser el destino de vacaciones preferido por los habitantes de la Ciudad de México, su éxito ha decaído en las últimas décadas, dejando como resultado que poco más de la mitad de su población viva en situación de pobreza y poco más del treinta por ciento viva en situación de vulnerabilidad (INEGI, 2022).
Tomado en cuenta las cifras anteriores y sumando los desastres causados por el paso del huracán Otis el pasado miércoles 25 de octubre, Acapulco se enfrenta a un significativo desafío de resiliencia. A menos de una semana del incidente, aún no se conoce la magnitud, ni se tiene un inventario de los daños materiales que existen, pero es evidente que la mayor parte del municipio ha sufrido graves afectaciones.
El Dr. José Alberto Lara, investigador del Centro Transdisciplinar Universitario para la Sustentabilidad de la Universidad Iberoamericana, explica que la rápida evolución de Otis, que pasó de tormenta tropical a huracán categoría 5 en tan solo 12 horas, nos habla de que el cambio climático está generando incertidumbres tremendas (Mendoza, 2023).
Se sabe que los eventos naturales aumentarán a medida que las temperaturas sigan incrementando debido al cambio climático. Hasta la fecha, la política climática aplicada en América Latina se ha centrado en la mitigación, es decir, en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Si bien esto es de suma importancia, especialmente en ciudades costeras como Acapulco, las políticas también deben orientarse hacia la adaptación y la reducción de riesgos ante fenómenos naturales. Esto implica la necesidad de contar con mayores recursos económicos para invertir en infraestructura (Margullis, 2016).
La disponibilidad de recursos económicos y la elección de fuentes adecuadas de financiamiento son factores determinantes para la viabilidad de la implementación de las acciones descritas. Es fundamental contar con recursos suficientes para acelerar el proceso de reconstrucción en Acapulco, garantizando la construcción de infraestructura de alta calidad que pueda adaptarse al cambio climático. Además, se busca mejorar las condiciones de habitabilidad preexistentes en Acapulco, con el objetivo de impulsar el desarrollo social y económico del puerto.
En el contexto del cambio climático, existen alternativas innovadoras de financiamiento nacionales e internacionales, tales como la asociación público-privada, asociaciones con ONG’s y compañías internacionales, fondos de las agencias de cooperación para el desarrollo, fondos especializados en cambio climático, mecanismos de impuestos y esquemas de compensación ambiental, como multas e impuestos ambientales.
El gobierno de México ya está trabajando en un plan para la reconstrucción de Acapulco. Por supuesto, se debe empezar por garantizar el acceso a atención médica, agua, comida, vestimenta y una vivienda digna (al menos temporal) a toda la población. Sin embargo, a la par de lo anterior, es fundamental asegurar una planeación urbana a largo plazo para evitar simplemente “parchar” los daños y que los beneficios de la ayuda para el desarrollo tengan un alcance equitativo para toda la población y no solamente el sector turístico.
La reconstrucción de Acapulco debe planificarse teniendo en cuenta las alternativas de financiamiento para llevarla a cabo. Si los proyectos para la reconstrucción integran conceptos clave para la mitigación y adaptación al cambio climático, como la utilización de energías limpias, la restauración, conservación y protección de áreas naturales, el manejo adecuado del agua, etc. se puede acelerar su ejecución porque serán propensos a ser fondeados. Una de las ventajas del fondeo es que no genera deuda para gobiernos o sector privado, por lo que simplemente suma a los recursos que se destinarán para la reconstrucción.
Nos encontramos en un punto crucial en el que el futuro del desarrollo sostenible de Acapulco dependerá de la planeación a largo plazo que se haga en las siguientes semanas y meses.
Referencias
Mendoza, Jazmín (2023). Cambio climático traerá más incertidumbres como las causadas por el huracán ‘Otis’: investigador IBERO. Recuperado en: https://ibero.mx/prensa/cambio-climatico-traera-mas-incertidumbres-como-las-causadas-por-el-huracan-otis-investigador-ibero
Margullis, Sergio (2016). Vulnerabilidad y adaptación de las ciudades de América Latina al Cambio Climático. Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Santiago, Chile
Arquitecta. Alumna de la Maestría de Proyecto Urbanos de la Universidad Iberoamericana