Para responder a la pregunta ¿qué requiere México para crecer?, es inevitable establecer que la solución es muy compleja y depende del punto de vista de quien la aborde. Un elemento es la generación de más y mejores oportunidades de empleo, pues es un hecho que el capital humano es el factor más importante para generar riqueza, de manera que, ‘nación que no trabaja, nación que no produce’.
En este sentido, si no hay empleos, no hay trabajo. Sin este, no hay una importante contribución al crecimiento económico.
En México, la población es de 127 millones 575 mil 529 millones de mexicanos de acuerdo con datos del Banco Mundial, de los cuales la población en edad de trabajar (más de 15 años) es de alrededor de 96 millones de individuos. De estos, 57 millones pertenecen a la Población Económicamente Activa (que están en posibilidad de trabajar). Sin embargo, solamente 55 millones forman parte de la Población Ocupada (los que están trabajando), y quedan alrededor de 71 millones de mexicanos que no lo están. Veamos cómo se divide esa cifra de acuerdo con sus características específicas: casi 31 millones corresponden a población menor de 15 años, 38.5 millones forman parte de la Población Económicamente Inactiva y casi 2 millones son individuos que están desocupados. Esto quiere decir que aproximadamente 43% de la población mexicana trabaja (ocupada), de estos individuos, 70% son asalariados, 22 % trabajan por cuenta propia, 5% son empleadores y el restante 3% no recibe paga.
En estas circunstancias, se requiere que más mexicanos consigan trabajo formal y que quienes ya están ocupados perciban mejores ingresos, pues de acuerdo con datos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, el ingreso promedio de la población ocupada al primer trimestre de este año asciende a 6 mil 814 pesos a nivel nacional. También cabe señalar que, de acuerdo con el reporte económico de trabajadores cotizantes al IMSS del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas, publicado el 12 de junio de este año, en mayo había casi 20 millones de asegurados, lo que representa 54.1% de la población ocupada.
En estas condiciones, es muy difícil que mejore la productividad y, en consecuencia, aumente el crecimiento económico. Tan solo en 2019, en el índice global de la productividad laboral de la economía, elaborado por México ¿Cómo vamos?, la productividad a tasa anualizada presentó tasas negativas.
Esta situación hace urgente crear más de los 250 mil empleos formales que se generaron el año pasado y que vayan acompañados de políticas públicas que añadan mayor valor agregado al crecimiento económico a través de mayores montos de inversión en innovación, en infraestructura, y en las actividades energéticas, de transporte y de telecomunicaciones, para que sus precios y tarifas sean competitivos a nivel internacional.