Pásele al segundo piso
Por Arlequín
33 millones de personas, y un Arlequín, no podían estar equivocados. Le gente salió a las urnas y dijo fuerte y claro: queremos que siga la transformación.
El jefe máximo, el líder, ya puede ir tranquilo a su quinta en Palenque pues no solo dejará sentada en la silla del águila a su hija amada en la que tiene puesta su complacencia, sino que, para muchos mexicanos, como es el caso de este aporreateclas, él es ya el mejor presidente que ha tenido México. No solo transformó al país como en su momento lo hizo Benito Juárez, sino que Andrés Manuel López Obrador, además, sabrá dejar el poder a tiempo, cosa que no hizo el Benemérito de las Américas. La única crítica que AMLO ha hecho al presidente Juárez es que se aferró al poder, y él ha prometido que no lo hará.
La victoria de la 4T se veía venir, y no es que este Arlequín tenga una bola de cristal o sea un pitoniso, sino que los beneficios para los mexicanos que se generaron durante este primer piso, pavimentaron en automático el camino hacía el segundo piso de la transformación.
Quién, en su sano juicio, no querría seguir gozando de las bendiciones que se derramaron sobre el pueblo en los últimos seis años.
Cómo no iba a arrasar Morena en las urnas sí en solo seis años dio a los mexicanos uno de los mejores sistemas de salud del planeta, y con todo y la farmacia más grande del mundo en la que se encuentran siempre todos los medicamentos habidos y por haber.
Solo los países muy desarrollados crearon sus vacunas para inmunizar a sus ciudadanos ante el virus del COVID que sumió al mundo en una pandemia, y México fue una de esas naciones que lo logró. Ya muy pronto estará disponible la vacuna Patria, que el gobierno de la 4T creó para domar al coronavirus de 2019. Y aunque quizá llega con un pelín de retraso, lo importante es que México se coloca como una de las potencias mundiales que tienen su propia vacuna.
Quién no votaría por el gobierno que nos trajo la paz. Por este gobierno que hizo temblar a los criminales más despiadados con la amenaza de que si no se portaban bien y seguían traficando dogas, extorsionando, secuestrando gente, y regando muertos por todo el país, iban a ser acusados con sus madres y sus abuelos. Así, con abrazos, sin balazos y con la amenaza de la chancla de sus madres, todos entraron al redil, y hoy, el país es pacífico y tranquilo.
No es de extrañar que casi 36 millones de mexicanos votaran por Claudia Sheinbaum, pue si en el primer piso de la 4T AMLO construyó trenes, aeropuertos y hasta una aerolínea, en este segundo piso llegó el momento de que el pueblo comience a gozar de esta infraestructura, y muy probablemente, se lance un nuevo programa social llamado Viajes del Bienestar, en el que los ciudadanos reciban una tarjeta con un dinerito para que puedan viajar por el país y usar el Tren Maya, el AIFA y Mexicana de Aviación pagando precios preferenciales, y en algunos casos, como el de los adultos mayores o jóvenes que estén construyendo el futuro, el pasaje será gratuito.
Quien estaría tan tonto como para no cruzar el logo de Morena en la boleta después de haber disfrutado por seis años de un precio de la gasolina estable y sin aumentos, tal como lo prometió el presidente López Obrador al inicio de su mandato, y como lo ha prometido ya Claudia Sheinbaum para su administración. ¿En qué otro país del mundo le pueden garantizar que la gasolina no aumentará de precio en 12 años?
Pero quizá lo que más votos trajo a la Cuarta Trasformación fue que este gobierno venció a la principal amenaza que tenía la democracia mexicana: la corrupción. Los fraudes, peculados, moches y mordidas son cosas del pasado. Y, si por ahí llegó a haber algún caso menor, como el de Segalmex, un desafortunado descuido que permitió que se desviaran más de 15 mil millones de pesos que debían llegar a la población que más lo necesitaba, el caso no quedó impune, pues el director de Segalmex, Ignacio Ovalle, fue reprendido y como castigo salió de esa institución y fue enviado como funcionario de la Secretaria de Gobernación, y condenado a ganar un sueldo de 109 mil pesos mensuales para que la próxima vez ponga más atención.
Nacho Valle, como lo solía llamar su amigo el Presidente, fue visto hace unos días en un lujoso resort de Los Cabos, donde seguramente está reflexionado sobre su falta de atención, y pensando cómo le habrán hecho sus subordinados para sacar esos 15 mil millones de pesos sin que él se diera cuenta.
Pero no solo se trata de una transformación que trajo apoyos en efectivo, obras magnas, servicios de primer mundo, y que acabó de tajo con la corrupción, sino que también nos regresó algunos valores que la vieja política, en especial la del periodo neoliberal, hizo que se perdieran.
Este gobierno no mintió, siempre habló de frente al pueblo, por ejemplo, cuando la pandemia azotó al mundo, este gobierno dijo que la domaría, la domó.
Este gobierno no robó, peso que entró a las arcas, peso que se gastó en beneficio del pueblo, eso de que los hijos del Presidente se enriquecieron y beneficiaron a sus amigos, es pura especulación y mala fe de los conservadores que, como el león, creen que todos son de su condición.
Y desde luego, esta Cuarta Transformación no traicionó a nadie, y desde luego, no traicionó a sus propios valores, por ejemplo, se dijo que habría austeridad, y la hubo, quizá no todos los miembros del gobierno vivieron con 200 pesos en su cartera y par de zapatos, pero tampoco hubo extravagancias, como la compra de residencias y otras propiedades.
Es así como se logró que los ciudadanos llenaran las urnas de votos que permitirán unir el primer nivel con el segundo piso de la Cuarta Transformación, obra que inicia el primer minuto de octubre. ¡Prepárese, viene lo mejor!
ME CANSO GANSO. - El fraude.
Que no le digan, que no le cuenten, porque quizá le mienten. Claro que hubo un fraude en la elección. Marko Cortés, jefe nacional del PAN, y Alejandro “Alito” Moreno, presidente nacional del PRI y Jesus Zambrano, líder nacional del PRD, resultaron ser todo un fraude, mejor dicho, un megafraude.