En noviembre de 1993 el PRI destapó a Luis Donaldo Colosio como candidato a la presidencia de la República. Meses antes, el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari ya había decidido que Colosio se convirtiera en el abanderado priista para sucederlo en el cargo. Sin embargo, en enero de 1994 ante las versiones de que su elegido sería sustituido como candidato por el entonces comisionado para la paz en Chiapas, Manuel Camacho Solís , don Carlos tuvo que pronunciar una frase que lo inmortalizó: “No se hagan bolas”, solo hay un candidato, Colosio. Ahora usted, querida lectora, querido lector, con todo respeto, no se haga bolas.
Como muchas veces le he advertido aquí, me lo quieren confundir, le quieren hacer creer que como sucedía en los días oscuros del periodo neoliberal, el presidente Andrés Manuel López Obrador , ya escogió con tres años de anterioridad a la sucesora.
Es cierto que “ el dedito ” presidencial de AMLO decide sobre muchas, muchísimas cosas, pero no tiene absolutamente nada que ver el dedazo que utilizaban los conservadores priistas para designar a sus sucesores. Que va, el dedo del actual Presidente está conectado directamente a la voluntad del pueblo, es un dedo liberal, un dedo democrático, un dedo humanista, un dedo cristiano, que sirve para muchas cosas, pero no para señalar a su sucesora.
Un Presidente que está haciendo una transformación del país, solamente comparada con la Independencia , la Reforma y la Revolución , no se expondría jamás a que alguien le reprochara que incurrió en lo que tanto criticaba.
AMLO no es tonto, tonto es el que cree que AMLO es tonto, y con esa inteligencia que le fue otorgada, no caería en una tentación tan conservadora. Imagínese, sus adversarios se lo acabarían en críticas. Para acabar pronto, no hay manera de que AMLO sea igual que Salinas ¡Jamás!
Y antes de que usted me salga con la fotito esa que nada circulando por todos los medios fifís y conservadores en la que se observa al Presidente sonriente levantar el brazo de la jefa de gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum , de una vez le digo, que eso no significa que haya alguna preferencia, el piso está muy parejo para todos los morenistas, que como doña Claudia buscan legítimamente la presidencia.
¿No cree usted que encargarle al legislador que pasen todas sus reformas sin que se les mueva una sola coma, es una señal de gran confianza? Pues así es, el Presidente es generoso con todos aquellos que han dicho que buscarán sucederlo en el cargo en 2024, como es el caso de don Ricardo.
Y sí, es cierto que el Presidente ha tenido algunos comentarios positivos para doña Claudia. “(La CDMX) es una ciudad muy solidaria, muy fraterna, además bien gobernada por Claudia Sheinbaum” , dijo el miércoles de esta semana durante una gira por las alcaldías de Gustavo A. Madero y Tláhuac.
Antes, el pasado viernes por la mañana, el presidente López Obrador dijo que él no realiza muchas giras de trabajo por la Ciudad de México porque Claudia Sheinbaum le aligera la carga de trabajo. “Me representa muy bien”, afirmó.
Pero eso es sincero, nada tiene que ver con la sucesión presidencial en 2024 , como tampoco tiene nada que ver con las versiones que aseguran que el Presidente está realizando, y seguirá realizando giras por la capital para evitar que dentro de tres años vuelva suceder lo ocurrido en junio pasado cuando la oposición le arrebató a Morena la mayoría de la alcaldías de la ciudad.
¿Qué culpa tiene el Presidente de que Sheinbaum gobierne bien? ¿Qué culpa tiene que ella represente al 100% los ideales que él defiende? ¿Qué culpa tiene ella de ser tan eficiente? Sería una injusticia que el Presidente, para evitar que los demás murmuren que ella es la elegida, que es su candidata, dejara de reconocer los logros de la jefa de gobierno. Además, recuerde usted que el pecho de AMLO no es bodega.
Y para que vea que este piso de la sucesión está más parejo que el de las pistas del nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles , solo recuerde que así como AMLO elogia a doña Claudia, y la placea en todos los eventos oficiales; y así como le encarga a Monreal sacar las complicadas iniciativas, también le da juego al canciller Marcelo Ebrard .
Por ejemplo, la más reciente y reluciente misión. Lo mandó a recibir al aeropuerto al presidente de la hermana República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, quien vino a México a participar en la Cumbre de la CELAC .
Ya se puede imaginar el prestigioso cartel del que se está haciendo don Marcelo en el mundo entero al aparecer dando la bienvenida a México y caminando sobre la alfombra roja codo a codo con el estadista venezolano, famoso por su respeto irrestricto a la democracia y a los derechos humanos.
Sin duda, ese honor que AMLO le dio a Ebrard es una muestra de que quiere que todos los presidenciables brillen, pues bien pudo mandar a Sheinbaum a recibir a Maduro al aeropuerto, dado que la terminal área aún está dentro de la Ciudad de México. O mejor aún, el mandatario pudo haberle pedido a doña Claudia que le organizara al prócer venezolano un vistoso acto en el bello edificio sede del gobierno capitalino para entregarle las llaves de la ciudad y nombrarlo huésped distinguido. Pero no, el honor de hacerle los honores a Maduro fue para el canciller Ebrard. Ya ve cómo está parejo el piso.
Tanto Ebrard, de manera más discreta, como Monreal, de forma más pública, se han quejado de que no hay piso parejo, que el Presidente está privilegiando a Sheinbaum, pero los hechos hablan por sí solos, para los tres han habido misiones, y los tres las han cumplido, así que cualquiera de ellos puede ser el candidato o la candidata a la Presidencia, pero lo será por la voluntad del pueblo, que es el que manda, no por la decisión de AMLO.
Así que don Marcelo , don Ricardo , lectores, lectoras, no se hagan bolas, no hay candidata consentida. El piso está muy, pero muy parejo, tan parejo como un vado.
ME CANSO GANSO.-La transformación
Quien diga que este gobierno no está haciendo las cosas diferentes miente. Ni Fox , Calderón o Peña se le hubiera ocurrido acusar de delincuencia organizada a 31 científicos y pedir que por su alta peligrosidad fueran encerrados en el penal de alta seguridad del Altiplano. Con estas estrategias para acabar con el crimen, no dude usted que el país pronto estará en plena calma.