¿Es usted del grupo de conservadores, contratransformistas y contrarevolucionarios que cree que el país se está militarizando? Si así lo cree, disculpe, pero está muy, pero muy equivocado.
Y si piensa que militarizar el gobierno es ordenar que los soldados y marinos hagan el trabajo que los inútiles o corruptos civiles no pueden hacer, siéntese, pues aún hay muchas tareas que el actual gobierno de la Cuarta Transformación está por encomendar a las mujeres y hombres con uniforme.
Ya lo dijo, y muy claro el almirante secretario de la Marina, José Rafael Ojeda Durán : “ Déjenme decirlo, porque es algo muy cierto, México carece de servidores públicos honestos, por eso tenemos este problema de una alta corrupción …. La gran diferencia entre nosotros y muchas otras instituciones es que nosotros no podemos darnos el lujo de tener malos elementos. Nosotros desde el general ( Sandoval ), hasta el último soldado, desde el almirante secretario hasta el último marino, somos servidores públicos, creamos servidores públicos a la sociedad mexicana.
“Ambas instituciones, la Secretaría de la Defensa Nacional, la Marina, a través de nuestras escuelas, la Heroica Escuela Naval , el Heroico Colegio Militar , creamos hombres y mujeres con valores, con principios, personal que tiene una ética profesional”.
Así que el diagnóstico estaba ahí desde julio. Los civiles no sirven para el servicio público, pues son corruptos por naturaleza. Ni hablar de las universidades e instituciones de educación superior, como la UNAM , el CIDE , el ITAM y demás porque se volvieron un semillero de neoliberales incapaces de servir a México y menos de crear buenos y honestos servidores públicos.
Como verá, no hay para dónde hacerse, los militares tienen que hacer un sacrificio por la patria y dedicarse a labores para las que no fueron creados, pero que la nación demanda con urgencia. Pero tenga la tranquilidad de que las fuerzas armadas no tienen ambiciones políticas ni económicas, ellas no han buscado nada. Pero, comprenda que es lógico que a mayores tareas mayor presupuesto y poder, pero eso es circunstancial, no están tras el dinero o el poder, sus valores son otros.
¿Qué hacían los neoliberales? Los mandaban, a soldados y marinos, a enfrentar a los cárteles de las drogas a balazo limpio y sin abrazos , a destruir campos de amapola y mariguana , sin consejos para los progenitores de los malosos, y a exponerlos a caer en la tentación de la corrupción.
Ahora, en esta Cuarta Transformación ya no destruyen, construyen. Se han convertido en la constructora más próspera del país, lo mismo hacen aeropuertos, que trenes, carreteras o puentes. Un día limpian el sargazo de las playas del caribe mexicano y al otro montan coloridos desfiles, en los que aun como pueblo vestido de uniforme, lo dejan para representar a Juárez, Hidalgo, Zapata, Madero, Villa y recordar pasajes de la historia del país, montajes escénicos de las anteriores tres transformaciones. Todo muy bonito y colorido.
Además de la excelsa puesta en escena, los militares han llegado a hacer solamente lo que los civiles no han podido, y bajo ese criterio, aún tienen muchos espacios por ocupar en el gobierno federal.
Por ejemplo, para que queremos un secretario de Comunicaciones y Transportes civil, que no comunica, ni construye ni transporta nada. Ahí tiene que llegar un general de división que sepa cómo hacer que las cosas sucedan. Que si mañana el Presidente se levanta de malas y quiere que el Aeropuerto Felipe Angeles ya no se construya en Santa Lucía , sino en Cuernavaca, los soldados agarren su maquinaria y se lleven la obra a Morelos ¿Por qué no?
En Educación se requiere un mando que sepa que Hermosillo y Cananea, por el momento, no están ubicados en Jalisco. En salud, no necesitamos un secretario que no quiere que los medios se enteren de que viene una cuarta ola de Covid . En esa cartera se necesita un general médico militar que saque el pecho para recibir de frente la cuarta, quinta, o cualquier otra ola que venga.
Un militar que, como suelen ser ellos, sea muy abierto y transparente con los medios y la sociedad, y que en vez de meter la cabeza en la tierra como el doctor Jorge Alcocer , salga a dar conferencias de prensa diarias y decir toda la verdad, y nada más que la verdad, sobre el curso de la pandemia. Algo así como un Hugo López-Gatell , pero en versión militar. Un divisionario que no ponga pretextos y que acabe con el desabasto de medicinas en el país, para que el Presidente pueda dormir con la conciencia tranquila.
En seguridad no nos sirve una secretaria que por más bien portada que sea, por más que se levante todos los días a las 4 de la mañana para estar puntual a las seis en Palacio Nacional, el número de muertos por violencia no ceda y ya supera los 100 mil asesinatos dolosos en los tres años de esta administración. Ahí se necesita de un experto en inteligencia militar que vaya dos pasos delante de los grupos criminales. Un general que tenga bajo su mando no solo la Guardia Nacional, sino el control total de la seguridad pública , ¿verdad, doña Rosy ? Si ellos pueden con la seguridad nacional, imagínese si no podrán con la seguridad pública.
Y sobre los derechos humanos ni se preocupe, ellos tienen la instrucción de su comandante en jefe, el Presidente, de que les queda prohibidísimo violar las garantías de los ciudadanos, y ni modo que vayan desobedecer a su comandante supremo y líder máximo de la 4T , ni lo piense. Y si se requiere hacer algunas pequeñas concesiones en aras de combatir a los malos, siempre habrá la posibilidad de que el Presidente publique algún bando, memorándum, acuerdo o decreto para limpiarles el camino.
Imagine un militar en Hacienda ¿Quién se atrevería a decirle que no a sus pagar impuestos? Uno más en la función pública, para que de un jalón, y para siempre, acabe con la corrupción . Y qué tal en la Secretaría de Bienestar , en donde se manejan miles de millones de pesos para pagar programas sociales, como el de las pensiones a los adultos mayores. Ahí se necesita una de esas mujeres u hombres que solo se hacen en las escuelas militares y que son a prueba de corrupción. En resumen, no hay un rincón del gobierno en el que no se requiera de un militar.
¿Y si de una vez se postula uno para 2024 , para no errar?
ME CANSO GANSO.- ¿Llegó la hora de los balazos en la 4T?
El miércoles en Zacatecas el general Luis Cresencio Sandoval , secretario de la Defensa Nacional , anunció que ante el recrudecimiento de la violencia por la disputa de grupos criminales y el aumento del homicidio doloso en la entidad, se enviarán mil 954 elementos militares y mil 644 agentes de la Guardia Nacional, así como tres helicópteros artillados para reforzar la seguridad . Y para qué quieren los helicópteros artillados, si la política anticrimen de la 4T es muy clara: abrazos, no balazos. ¿Será que esos helicópteros disparan abrazos?