Cuando uno piensa que la ya transformó todo lo transformable en México, aún hay más, Raúl Velasco dixit .

La 4T logró que con una política de austeridad republicana el gobierno federal funcionara como relojito suizo, pero ahora, el reto es mayor. Ahora entrará en vigor la .

“Ya estoy pensando qué le vamos a dar otra ”, anunció el jueves el presidente Andrés Manuel López Obrador.

“Es que se mal acostumbraron, se les olvidó que somos servidores públicos , para qué se meten al servicio público si lo que quieren es hacer dinero”.

Este se quita el sombrero de tres picos ante tan noble y atrevido planteamiento.

¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!
¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!

Pero claro que siempre se puede hacer más con menos.

Así que nada de viajar en avión, ahora todas las giras serán en autobús y no crea que en primera clase. Ya con la austeridad republicana se había cortado de tajo la práctica de viajar en aviones del gobierno y se utilizaban solo aviones de línea. Pero siempre se le puede dar otro buen apretón al cinturón .

Se acabaron los desayunos con tamalitos de chipilín, chanchamitos y las comidas con pejelagarto y otras viandas. En las mesas de Palacio Nacional solo se servirá comida corrida de dos tiempos, sopita de fideo, un guisado con frijoles de la olla o refritos y aguas frescas.

El sector educativo también aguanta otra podadita. Se pueden recortar los gastos a las escuelas, pues no se puede enseñar el nuevo socialismo diseñado por el maestro Marx Arriaga a niños con aspiraciones neoliberales o fifís que quieran tener comodidades como agua potable y servicios sanitarios limpios y que funcionen.

¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!
¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!

Ya se acabó con la , ahora para que rinda más el presupuesto solo habrá clases un día a la semana, así en vez de pagar 6 maestros, se podría pagar solo a uno, que los lunes diera clases a niños de primero y segundo, los martes a tercero, miércoles a cuarto, jueves a quinto y el viernes a sexto. Quizá tome a los niños más de seis años cursar la primaria, pero cuál es la prisa. Aquí lo que se trata es de tener un sistema educativo que funcione a lo pobre pero honrado, no de estar pensando en esos conceptos neoliberales como el de la calidad de educación, la evaluación estandarizada internacional o la competitividad. Y después de la educación básica, nada de aspirar a la superior o a un maldito y conservador posgrado. Eso se acabó.

Otro sector al que la pobreza puede llegar es al sistema de salud . Dígale adiós al actual dispendio en la compra de medicamentos y de carísimos equipos de tecnología avanzada con lo que se estaba dotando a los hospitales del país. Se acabaron las comodidades y los privilegios que actualmente le otorga el sistema sanitario. Ahora, si usted quiere ser operado tendrá que esperar semanas a que le programen su cirugía y pagar por algunos de los insumos que se utilizarán. Ya no será cómo en la época de la austeridad republicana que cuando llegaba a un hospital siempre era atendido de manera expedita y que, si lo requería, en minutos era atendido por un especialista quién le enviaba una batería completa de estudios que estaban listos el mismo que eran solicitados. Con esta migración hacía la política de pobreza franciscana usted quizá va a pasar algunas incomodidades y retrasos en la atención, pero piense cuántas personas pobres se beneficiarán si a usted le quitan todos los lujos que actualmente tiene en el sistema sanitario.

¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!
¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!

Sí, quizá va perder algunas comodidades burguesas que le otorgan hoy el IMSS o el ISSSTE, pero con ese ahorro pronto usted tendrá un tren o una refinería , ese dinero no se lo robarán como lo hacían los gobiernos anteriores, simplemente se utilizará para otras prioridades.

Desde luego que la pobreza franciscana también puede aplicarse en el tema de la seguridad pública . A mayor recorte en el gasto público, es posible que haya menos policías y soldados en las calles para proteger tanto a los ciudadanos de bien, como a los criminales. Pero ahora, los ciudadanos van a tener que aprender a cuidarse solos, y los delincuentes, que ya tuvieron más de tres años para aprender a cuidarse, ahora tendrán que hacerlo sin la ayuda de las fuerzas del orden. Además, se debe aprovechar que, en algunos puntos del país, cada vez en más, hay retenes de que se encargan de revisar quien transita por carreteras y veredas, y al ser grupos irregulares y al margen de la ley, no le generan ningún costo al gobierno, de sus sueldos y prestaciones se encargan sus patrones.

En otro ámbito, para ahorrar recursos, las funciones del Instituto Nacional Electoral podrían pasar al gobierno federal. El INE desaparecerá y con ello se ahorrarán varios miles de millones de pesos. Aquí sí será puro ahorro, pues los procesos electorales se le podrían encargar a un gran experto en el tema, Manuel Bartlett, hombre cuya honorabilidad y honradez son a prueba de todo, y que con el mismo austero sueldo que percibe hoy, como director de la Comisión Federal de Electricidad , puede organizar los procesos electorales que hagan falta.

Esa misma estrategia se puede utilizar para otros organismos autónomos, como el Instituto Nacional de Transparencia (Inai), que puede ser operado por las fuerzas armadas. Los soldados y marinos, caracterizados por su apertura y transparencia, serían los encargados de garantizar que toda la información pública del gobierno federal esté siempre disponible y a la mano de los ciudadanos que la requieran.

¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!
¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!

En otros casos, la política de la pobreza franciscana serviría también para dar lecciones a aquellas personas o instituciones que hayan desviado en el camino, como por ejemplo la UNAM. Se podría reducir al máximo el presupuesto de la Universidad Nacional Autónoma de México, hasta que los alumnos y académicos regresen a la razón. Hasta que la máxima casa de estudios exorcice los demonios de la derechización, el conservadurismo y el mercantilismo que se han metido a sus cuerpos, habrá presupuesto. Mientras los universitarios reaccionan, vuelven al camino del bien y abrazan los principios de la Cuarta Transformación, no debe haber ni un solo peso de presupuesto. Y en tanto los universitarios comprenden su error, y regresan al camino correcto, el gobierno puede traer profesionales de otras partes del mundo, por decir algo, médicos de Cuba, expertos en seguridad de Venezuela o ingenieros de Nicaragua.

Todas estas disposiciones de pobreza franciscana podrían quedar plasmadas en un documento histórico que sea firmado en el austero despacho presidencial, del austero . Por el bien de todos, primero los pobres.

ME CANSO GANSO- Adivine quién dijo esto:

”. "Desde hace dos o tres años”, México dejó la transición democrática y está iniciando una "reversión autoritaria” con “un nuevo rey de la selva”: el crimen organizado.

El autor de estas frases es ¿Carlos Salinas? ¿Vicente Fox? ¿Felipe Calderón? No, ninguno de ellos. Así piensa hoy el hombre que le colocó la banda presidencial a AMLO en diciembre de 2018; el hombre que de 2018 a 2019 fue el presidente de la Cámara de Diputados abanderando los colores e ideales de Morena. Así piensa hoy Porfirio Muñoz Ledo.

¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!
¡Extra, extra, llegó la pobreza franciscana!

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