Bien dicen que si quiere que las cosas salgan bien, es mejor hacerlas uno mismo, y eso, querida lectora, querido lector, es lo que pretende hacer la Cuarta Transformación. Como el Instituto Nacional Electoral es un nido de conservadores y debe ser “exterminado”, es necesario crear uno nuevo, alejado de los partidos, en especial de los de oposición; que sea austero y, desde luego, cien por ciento independiente.
Como este Arlequín , además de ser un analista serio de la política cómica, ama la democracia , tiene algunas humildes propuestas para crear un INE de Cuarta, de Cuarta Transformación, desde luego.
Primero, lo primero. Actualmente el INE tiene 11 consejeros que cobran más que el Presidente –imagínese que blasfemia-, por lo tanto, la primera ideota es que de tajo se corten seis plazas, es decir, que el INE de Cuarta se integre solo por 5 consejeros. Y por razones de austeridad y de respeto al sueldo presidencial, que estos cinco nuevos consejeros sean honorarios , es decir, que no cobren ni un peso, para que quede claro que ellos no son unos ambiciosos vulgares o vulgares ambiciosos.
Otro requisito es que los aspirantes a consejero sean totalmente independientes; aunque pudieron haber simpatizado o militado en algún partido excepto el PRI , PAN o PRD . Y así, cumpliendo esta nimiedad pueden ser consejeros de INE de Cuarta.
Usted dirá: ¿Y dónde vamos a conseguir a estos patriotas? ¿De dónde saldrán esos dechados de virtudes? Pues sí, si los hay y aquí se los enumero.
1.- Manuel Bartlett:
Sin duda, por su experiencia en temas electorales, don Manuelito puede ser no solo consejero del INE de Cuarta, sino su presidente vitalicio. A sus 85 años, este jovenazo ha sido gobernador, secretario de Gobernación, secretario de Educación y secretario General del PRI.
Sin embargo, con el currículo de don Bartlett, seguro usted tiene dudas, pero él ya se ha purificado y ahora es un hombre nuevo que defiende la democracia y que trabaja a favor de los pobres, de los marginados, de todos aquellos a los que el PRI oprimió por 70 años.
Además, don Manuel como secretario de Gobernación priista ya tuvo bajo su responsabilidad una elección presidencial y le salió de maravilla, pues ganó el candidato de su partido, aquel que dio inicio al hoy llamado “periodo neoliberal”, el innombrable Carlos Salinas de Gortari . Pero no se apure, ya se ha convertido en un alma buena y tenerlo en las filas del nuevo instituto sería una garantía de que nadie haría fraude electoral. Imagínese, ¿quién sería el osado en querer espantar al miedo, o venderle chiles a Herdez?
2.- Pío López Obrador:
Este personaje tiene muchas ventajas, pero primero y antes de que usted, acelerado conservador, diga que hay un conflicto de interés por ser hermano del Presidente de la República, debe de tener claro que AMLO no estará más en las boletas electorales. Recuerde que ha dicho que acabado su mandato se retira a su finca en Chiapas. Así que descarte un conflicto.
Ahora, ¿qué hace de don Pío un consejero ideal? Desde luego, su experiencia en el tema de las aportaciones de dinero a las campañas. Estaría que ni mandado a hacer para estar a cargo de la fiscalización de esos recursos, él se la sabe de todas, todas. Y, claro, no dejaría pasar una sola triquiñuela ni permitiría la entrega de dinero en efectivo para los movimientos políticos de oposición.
3.-John Ackerman:
Sin duda, don John sería un lujo de consejero. Doctor, experto en política e independiente como el que más, un sueño. Sería como el Rolls-Royce de los consejeros, pues él integró el Comité Técnico de Evaluación de los anteriores aspirantes a consejeros del INE. Así que para qué tener a los aprendices si se puede tener al maestro, que digo maestro, al doctor. Este gran académico es además un destacado feminista y amante de la democracia. Lo dicho, un Rolls-Royce, un lujo para nuestra democracia.
4.- Epigmenio Ibarra:
Absolutamente independiente e imparcial, un árbitro nato. Don Epi podría, por su gran experiencia en medios, estar pendiente de que se cumplan con los tiempos oficiales, que nadie compre publicidad en medios, que los spots de los candidatos se apeguen a la ley, que no haya lenguaje de odio ni polarizador. Adicionalmente, es experto en encontrar y desvelar complots de la CIA, la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, orquestados para atacar la democracia mexicana. ¡Arroz!
5.-Antonio Attolini:
Como buen seguidor de la palabra de Jesucristo, sería incapaz de convalidar algún fraude electoral. El joven Toñito, un desinteresado luchador social, bien podría sacrificar sus aspiraciones de ser diputado para hacer un bien mayor al país e integrarse al INE de Cuarta. Su visión fresca, independiente, imparcial y cristiana mucho bien haría al nuevo instituto y a la organización de las elecciones presidenciales de 2024.
Desde luego, ninguno de los cinco antes mencionados ganaría más que el Presidente, de hecho, como le dije antes, sus cargos serían honorarios. Todos ellos, gracias a su esfuerzo y trabajo honesto, tienen resuelta su situación económica y garantizado su futuro.
Sí, aquí las pruebas: Don Manuel, humildemente tiene 30 casitas, algunas empresitas y algún dinerito ahorrado. Ackerman, más modesto, solo tiene siete casitas. Don Pío ha ido haciendo sus guardaditos de algunos negocios que ha tenido en los últimos años, y de algunas migajitas que le han quedado de donativos para la causa; además, viene de una familia austera que no requiere de grandes lujos para subsistir, que no gasta en viajes al extranjero ni vive en palacios.
Por otro lado, de don Epigmenio, ni hablar, le acaban de caer a las cuentas de su empresa 150 milloncitos de pesos de un préstamo –milloncitos que bien trabajados y con honradez, dan para vivir en la justa medianía a la que está acostumbrado como el hombre de izquierda que es-. Y Attolini, como buen millenial, aceptaría pertenecer al INE de Cuarta solamente por vivir la experiencia, no por dinero.
Y ya resuelto el tema de los consejeros, ahora unos consejillos para que no salga tan caro el INE de Cuarta. ¡Este instituto será austero o no será!
Para qué gastar tanto en procesos electorales , si se pueden hacer asambleas en las plazas públicas en las que se lleve a los candidatos y se consulte a mano alzada a los asistentes quién quieren que sea su gobernador, alcalde o diputado.
¿No le gusta ese método? Pues entonces se puede utilizar otro más científico y que ya ha probado ser muy eficiente. Sí, cómo de que no, se trata nada más y nada menos que del casi ancestral método de la tómbola , ese en el que se meten en una esfera -o caja- papelitos con los nombres de todo aquél que quiera ser gobernador, alcalde o diputado. Luego, se dan vueltas a la esfera -o caja-, y una mano santa, de los nuevos consejeros electorales, saca el papel con el nombre del ganador.
¿Cómo la ve querido lector, querida lectora? Así de fácil y desde luego austero, pues lo único que se necesita es una tómbola -o una caja de cartón-, hojas de papel, que pueden ser recicladas, una pluma, una mano y listo. Pero es necesario señalar que no se trata de un modelo experimental , este método ya probó su eficacia. En 2018 Morena lo utilizó para elegir a varios de sus diputados y ya ve qué buenos han salido, ni una coma le mueven a las iniciativas del Presidente.
Pero como le conozco muy bien y sé que aún no está convencido, aquí le va otro método, el último grito de la moda: las encuestas, de las que esta semana el propio presidente AMLO dijo que para qué tantos brincos con el caso del candidato Félix Salgado Macedonio y sugirió al Tribunal Electoral que para no meterse en el complicado tema de las leyes electorales y la Constitución, de una vez por todas, levantara una encuesta entre la población de Guerrero para preguntarle si quiere que Salgado Macedonio sea candidato, aunque haya violado un poquito todo lo que se le ha puesto enfrente, como la ley electoral, al no reportar sus gastos de precampaña.
¿Y sabe qué? Esto de las encuestas, al igual que la tómbola, es un método avalado por Morena pues el propio presidente del partido, Mario Delgado , que es un presidentazo, fue electo por encuesta al igual que todos los actuales candidatos a gobernador del partido en el poder.
Sin más, aquí está la receta para crear un INE de Cuarta, el INE con el que sueña AMLO. ¿Cómo le quedó el ojo, querido lector, querida lectora?
ME CANSO GANSO.- Y por el logo ni se preocupen
Por cierto, si la sensatez se impone y se toman en cuenta las recomendaciones de este Arlequín , el logotipo del INE de Cuarta, puede ser encargado a los mismos artistas de cuarta que diseñaron el logotipo del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, esa obra de arte que tiene un avión y un mamut. En este caso, en lugar de avión podrían poner una tómbola y cambiar el mamut por un gansosaurio rex. Y como todos debemos cooperar para tener instituciones sólidas, los tres mil pesos que cuesta el logo van por cuenta de la Unión Nacional de Arlequines de la República Mexicana.