Por Antonio Medina
Fieles a su papel de lacayos del presidente Andrés Manuel López Obrador, los integrantes del Grupo Parlamentario de Morena en el Senado de la República, pusieron en marcha una nueva andanada para golpear al Poder Judicial a través de una serie de reformas a la Ley de Amparo.
La pretensión de modificar los artículos 129 y 148 tiene como objetivo evitar que los jueces suspendan leyes, decretos, normas, o megaproyectos que dañen el ejercicio y la progresividad de los derechos humanos de la ciudadanía.
La aprobación de la iniciativa por parte de la mayoría morenista en las Comisiones Unidas de Justicia y Estudios Legislativos del Senado de la República, subraya la obsesión de López Obrador por debilitar al Poder Judicial y así fortalecer su proyecto político caracterizado por el autoritarismo.
De aprobarse este documento en el pleno, el uso del juicio de amparo como instrumento utilizado por la ciudadanía, organizaciones civiles, activistas, y víctimas, para garantizar el ejercicio de sus derechos ante actos o normas gubernamentales que los vulneren, quedaría en una franca debilidad que consolidaría el desprecio de las leyes, la impunidad y el autoritarismo del Estado.
Para las poblaciones de la diversidad sexual, el juicio de amparo ha sido una valiosa herramienta jurídica que le ha permitido avanzar en temas como el matrimonio igualitario en distintas entidades del país, el reconocimiento de la identidad de género de las personas trans, el abasto de antirretrovirales para quienes viven con VIH, y la seguridad social para las y los cónyuges de las parejas del mismo sexo.
Además, en el Partido de la Revolución Democrática (PRD), el juicio de amparo lo hemos utilizado para apoyar la defensa de las infancias con cáncer víctimas de la negligencia criminal del gobierno de López Obrador que las dejó sin medicamentos. Esta batalla jurídica encabezada por la abogada Andrea Rocha, obligó a las autoridades mexicanas a otorgarles sus terapias oncológicas.
Las reformas legislativas a la Ley de Amparo ordenadas por el Jefe del Ejecutivo y puestas en marcha por la dócil bancada de Morena en el Senado de la República, implican para los grupos poblacionales en situación de vulnerabilidad -como lo han sido históricamente las poblaciones de la diversidad sexual-, eliminar al juicio de amparo como la principal herramienta jurídica para hacer respetar y mantener vigentes los derechos de las personas con una visión de progresividad.
No es la primera vez que Morena ataca al Poder Judicial, en un acto de total incongruencia, la diputada federal Celeste Ascencio -quien demagógicamente se asume como lesbiana e indígena-, propuso en septiembre de 2022 una iniciativa que buscaba quitarle a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la facultad de interpretar e invalidar artículos constitucionales.
La Ley de Amparo ha sido fundamental para combatir la exclusión y la discriminación hacia las personas LGBTI+, modificarla por tintes a todas luces revanchistas, equivale a dejar desprotegida a la ciudadanía ante los abusos del poder y encamina al país hacia una dictadura.
Director Nacional de Diversidad Sexual del PRD. @antoniomedina41